Vecinos acusan un pésimo acceso a la locomoción e inseguridad en Ruta D-43

“Durante las mañanas y tardes no contamos con locomoción pública mayor, y esto afecta la vida de miles de personas cada día”. En las palabras del dirigente social Juan Toro, presidente de la junta de vecinos Unión Venus del sector Pan de Azúcar, se evidencia la problemática que debe enfrentar a diario la comunidad al momento de optar por un servicio de transporte colectivo que, insisten, no responde a las necesidades existentes. 
El sector rural de la comuna de Coquimbo presenta una serie de necesidades actualmente y a ellas se suma la denuncia realizada por los habitantes, que emplazaron a las autoridades a fiscalizar la frecuencia de los microbuses de la empresa LINCOSUR y  velar por el acceso a movilización en una zona que ya reúne a  más de 15 mil personas, y adoptar medidas de seguridad vial. 

Testimonios

La carencia de un servicio de transporte como el requerido por la comunidad de Pan de Azúcar ocasiona una serie de inconvenientes a estudiantes y trabajadores que deben desplazarse dentro o fuera de la comuna puerto para desarrollar sus actividades, y acusan estar hartos de esperar por soluciones.
“En nuestro sector, el transporte mayor no cumple con sus recorridos, que deben iniciarse desde el acceso a Pan de Azúcar, hasta Cerrillos. Esto se repite cada día y ocasiona que muchas personas que debemos trabajar tengamos problemas de movilización, en desmedro de nuestras responsabilidades, sumado esto al mal estado de la vía y pocas señaléticas”, manifestó Víctor Werner, poblador del sector Pan de Azúcar, afectado por la problemática.

En el mismo tenor, Pedro Abarza, estudiante de educación superior, manifestó que “a la postergación de Pan de Azúcar, se suma esta problemática que afecta la calidad de vida de todos y desde hace años no posee solución alguna. Todas las mañanas y desde primera hora los microbuses no cumplen su recorrido y menos se detienen donde es debido, ocasionando que la gente corra el riesgo de atropello, y que muchos quedemos sin movilización; agregando que los conductores sacan sus letreros de servicios y corren a exceso de velocidad”, aseguró.

Juan Toro, presidente de la junta de vecinos Unión Venus, insistió en que “el problema de acceso a transporte es mayor, y los dirigentes de los microbuses no poseen ningún tipo de criterio con la comunidad a la cual prestan sus servicios. Además, hemos dialogado en múltiples ocasiones con el seremi de Transportes, pero el problema sigue y no aguantamos más. Exigimos que se cumpla el servicio que un privado entrega y eso lo deben hacer las autoridades con fiscalización y dar seguridad; lo que hoy no existe”.

Transportistas

Si bien la denuncia realizada por la comunidad del sector Pan de Azúcar es efectiva, y el problema (horarios punta) es reconocido por la empresa LINCOSUR, existen factores que inciden en el dificultoso acceso a la locomoción pública mayor. Sobre todo en horarios de alta congestión vial en la transitada Ruta D-43, que recibe el flujo local, más los traslados entre Ovalle y Coquimbo. 

“Nosotros enfrentamos a diario el problema de la congestión vehicular en la Ruta D-43, lo que impacta en el cumplimiento de las frecuencias en horarios punta y origina multas a los conductores. A ello se agrega que esta ruta es complicada y que existe cero conciencia vial de los conductores particulares para facilitar el traslado de la locomoción mayor. Este problema se debe enfrentar junto a la comunidad”, aseveró Manuel López, presidente de la empresa de microbuses LINCOSUR. 

Además indicó que se adoptaron medidas como extender los recorridos en horario punta y disponer de microbuses de acercamiento local. “Sin embargo, queremos dialogar con los dirigentes sociales, y buscar soluciones dentro de nuestra acción; hay disposición a agotar todas las instancias para dar cumplimiento a las demandas de los usuarios”, concluyó.