Una visita de reconocimiento a Caimanes y el tranque El Mauro realizó personal de ONEMI, la Unidad de Emergencia de la Municipalidad de Los Vilos y Sernageomin con el fin de recopilar información para iniciar la elaboración de un Plan de Alerta Temprana para Caimanes y el Valle de Pupío, dando con ello cumplimiento a lo indicado por la Corte Suprema en agosto de 2014.
En la ocasión se interiorizaron sobre el Manual de Emergencia interno de Minera Los Pelambres y la operación del tranque El Mauro, además de visitar las primeras obras desarrolladas en la localidad en el marco del plan de contingencia acordado entre la comunidad y la minera. Al respecto, Luis Jiménez, profesional de apoyo de la ONEMI regional, indicó que el plan “tiene una correlación hacia la comunidad. Es un plan que no tan solo abarca sus instalaciones (de MLP), sino que también vincula hacia la comunidad, lo que es completamente favorable”.
Por su parte, Nibaldo Antonucci, director comunal de Emergencia de Los Vilos, valoró el trabajo más integral y con mayores grados de confianza que se ha venido desarrollando con la gente de Caimanes. “Hasta hace un par de años el ánimo acá no era muy bueno. Pero luego del terremoto la comunidad se percató in situ que efectivamente el tranque cumplía con los requerimientos técnicos para soportar un movimiento sísmico como el de 8.4 del 16 de septiembre de 2015”, expresó.
Dentro de las obras visitadas en Caimanes se encuentran las mejoras en las vías de acceso y evacuación de la Escuela Clara Vial Orrego, señalética de evacuación para la población residente del área más baja del pueblo, la habilitación de una nueva zona de seguridad, calles para vehículos de emergencia e iluminación solar. Además, la instalación de una alarma sonora y la disponibilidad de un furgón para el traslado de personas con dificultades de movilidad o algún impedimento físico.
Rodrigo Lotina, jefe territorial de Minera Los Pelambres, destaca el valor de esta visita ya que “es sin duda un hito para comenzar a cumplir con el plan de alerta temprana mandatado por la Corte Suprema. De esta forma vamos cumpliendo con los compromisos adquiridos con la comunidad, sobre todo los temas referentes a la seguridad de los vecinos”, explica el ejecutivo.
Añade además que el recorrido por las operaciones y luego por el poblado de Caimanes, “permite dar certeza y dar cuenta de los avances alcanzados, avances que por cierto han sido de forma anticipada y de común acuerdo con la comunidad, como lo es la instalación de señalética, arreglos en la escuela, un furgón de traslado, botón de emergencia, el punto de encuentro de seguridad, entre otros”.
Desde la comunidad, Marcela Araya, presidenta del APR de Caimanes, valora estos esfuerzos. “De todas maneras esto ayuda a dar más tranquilidad, no va a ser nunca una tranquilidad de 100%, porque si bien es cierto tenemos un tranque de esa magnitud aguas arriba, pero la comunidad sí se ha mostrado un poco más tranquila a como se veía hace unos 5 o 6 años. Y el hecho de haber vivido un terremoto y que gracias a dios no sucedió nada también nos dio un poco más de tranquilidad. Hoy se está trabajando en conjunto entre la comunidad y la minera en todo este plan de emergencias”, destacó.
Las voces de Caimanes
En paralelo a estas acciones de coordinación en materia de seguridad, y en el marco del acuerdo firmado entre Los Pelambres y la comunidad del Valle del Pupío, se dio inicio a la implementación del Fondo de Desarrollo Comunitario en las localidades de El Rincón y Pupío con la realización de las reuniones de las comisiones destinadas a dar forma a los proyectos comunitarios. Cada comisión está conformada por siete vecinos de cada localidad, quienes se reunirán cada 15 días para definir y trabajar los posibles proyectos sociales.
Cristian Luscich, integrante de la comisión de Pupío, explicó que “la función de la comisión es encontrar todas las falencias que existen y mejorarlas para promover el desarrollo de las familias”. En este poblado ya han sido definidas algunas prioridades. Inés Ordenes, presidenta de la junta de vecinos, sostiene que estos recursos son bienvenidos, especialmente porque son los propios vecinos quienes pueden generar sus prioridades de desarrollo. “Esto es aún mejor porque son proyectos que nosotros vamos a hacer de acuerdo a nuestras necesidades. Es por esta razón que debemos ser muy cautelosos e inteligentes para invertir bien estos recursos”, explicó la dirigente.
A cinco kilómetros de Caimanes se encuentra El Rincón. Allí Rolando Tapia es un conocedor de la zona y sus necesidades. A sus 74 años, fueron sus propios vecinos quienes lo propusieron como integrante de la comisión. Respecto al programa de desarrollo comunitario, manifestó que “hay que pensar en el bien social y ojalá que toda la comunidad quede conforme en lo que se vaya a invertir”. Agregó que no se deben olvidar las tradiciones locales como la agricultura y la ganadería.