• Fotos: Marco Adasme
Desde el municipio aseguran que las casas son entregadas por la Onemi y por una empresa privada, gestión que hizo el alcalde para las familias que no calificaron a poco de la catástrofe de acuerdo a los criterios que tenía el gobierno

La comuna de Illapel fue una de las más afectadas tras el terremoto de septiembre del año pasado. Por lo mismo, la ayuda que el municipio pidió al gobierno fue al instante y básicamente consistió en viviendas de emergencia para quienes lo perdieron todo.

Este 16 de septiembre se cumplirá un año de la tragedia que enlutó a todo un país y las familias que lo perdieron todo, increíblemente, siguen a la espera de una ayuda. Es que las viviendas de emergencia siguen entregándose y se encuentran en el estadio municipal que sirve como centro de acopio. La mayoría son entregadas por el gobierno y otras, gracias a la gestión que realizó el edil Denis Cortés con la empresa Minera Los Pelambres y la Fundación Vivienda, principalmente para las familias que no calificaron de acuerdo a los criterios que tenía la Onemi o el ministerio del Interior.

Lo cierto es que la cantidad acumulada de material de construcción asusta. Y los vecinos, quienes aún no reciben lo que les corresponde, son quienes reclaman. Se quejan. Sin embargo, desde el municipio afirmaron que nada tiene que ver lo que pasa en su comuna con lo sucedido hace algún tiempo en Coquimbo, donde cajas con artículos de primera necesidad y viviendas de emergencia destinadas a los damnificados del terremoto y tsunami permanecerían en mal estado y acopiadas al interior del llamado “Fortín Mota”, en las inmediaciones de la Pampilla. Sí, dicen que este caso es muy distinto y las casas van llegando de manera progresiva y retiradas con tiempo.

“Ese material llegó hace muy pocos días y es material que se consiguió el alcalde gracias a la gestión de una empresa privada y principalmente debido al déficit muy alto que teníamos de viviendas que el estado no cubría. De hecho, llegan al estadio como un centro de acopio, pero entran y salen”, advierte David Araya, secretario municipal y encargado de reconstrucción del municipio.

Agrega que “las viviendas de emergencia, por ejemplo, estaban destinadas sólo para los propietarios o quienes tenían permiso para la ocupaciones de los suelos, pero no para arrendatarios ni tampoco para personas de otra condición. Entonces, quienes no calificaban en la entrega de viviendas de la Onemi se fueron quedando atrás, pese a lo mal que lo pasaron. En definitiva, el proceso de Onemi se ha demorado porque tienen requisitos especiales, pero lo importante es que cada vez que van llegando se van despachando de manera rápida hacia los distintos sectores”.

Además, aclara Araya que “las casas que llegan las traslada e instala una empresa contratista contratada por el gobierno y que el municipio sólo actúa como centro de Acopio. Insiste en que hasta ayer, por parte de la Onemi, ingresaron 70 viviendas de las cuales se han entregado 49 y que se solicitaron otras 120. Mientras que las viviendas que han llegado de Minera Los Pelambres son 18, se han entregado sólo 6 y tienen que llegar unas cien. Pero no duran más de un mes en el lugar”.

 

Suscríbete a El Día y recibe a diario la información más importante

* campos requeridos

 

 

Contenido relacionado

- {{similar.created}}

No hay contenido relacionado

Cargando ...

 

 

 

 

 

 

 

 

Diario El Día

 

 

 

X