Un lamentable hecho se produjo el día lunes en la comuna de Monte Patria. Un adulto mayor de 80 años fue encontrado fallecido en su domicilio, donde, según informó la PDI, vivía completamente solo desde hace bastante tiempo.
Las causas de su muerte aún están siendo investigadas, aunque se presume que se trata de un suicidio. Y es que el anciano había estado pasando por una profunda depresión producto de la soledad.
El hecho conmocionó a la jefa regional de la Fundación Las Rosas, Ximena Salinas, quien aseguró que esto pone al descubierto una vez más la situación de abandono en la que viven muchas personas al llegar a la tercera edad.
-¿Qué le produjo conocer esta situación?
“La verdad es que conocer situaciones como estas indigna, porque no es la primera vez que pasa. Hace poco también ocurrió con una señora y refleja lo que estamos viviendo hoy día, es una realidad que es lamentable, el abandono y el olvido que vive el adulto mayor, a todo nivel, tanto a nivel familiar cercano como también en relación a las políticas públicas, que estamos tan pendientes de ellas, pero que no vemos concretarse en esta materia. Creo que hay que activar las alarmas en cuanto a la protección del adulto mayor, porque estamos envejeciendo, nuestra proyección de vida es cada vez mayor, y a todos nos tocará en algún minuto tener que vivir con unas pensiones precarias. Esto tiene que cambiar en algún momento”.
-¿El Estado también abandona al adulto mayor?
“Sí, y creo que es sumamente injusto que a los 60 ó 65 años ya las personas no sirvan, que no sean viables para nuestra sociedad. Porque casi los tenemos desechados”.
-¿Hay una deuda pendiente con ellos?
“Creo que sí, hay una deuda pendiente que se nos está viniendo encima, y no nos vamos a dar cuenta cuando en 20 años más, la cantidad de adultos mayores que existe sea igual a la población de jóvenes. Ahí vamos a tener un problema. Por eso el llamado también es a las propias personas a envejecer sanos, porque estamos en una sociedad que muchas veces no nos permite envejecer sanos”.
-¿Cómo así?
“Lo que pasa es que estamos explotando nuestro sistema nervioso central, porque estamos bombardeados de tantas cosas electrónicas que no nos permitimos tener lectura, sentarnos a la mesa a tener grandes conversaciones, poder compartir con la familia, como pasaba antes en donde se daban esas situaciones exquisitas. En definitiva, todas estas cosas van a hacer que más temprano tengamos una demencia senil, que más temprano tengamos enfermedades cardiacas, más temprano se nos va a presentar el Alzheimer. Yo creo que tenemos que preocuparnos hoy de nosotros mismos, para cuando lleguemos a edades mayores”.
-Pero, cuando se llega a la vejez hay un rol de los hijos, que también es importante...
“Por supuesto, tienen que estar presentes y es un poco lo que te decía, enseñarles a nuestros propios hijos desde pequeños el respeto que hay que tenerle al adulto mayor, el valor que tienen ellos. Es triste ver que el abuelo está esperando una llamada que nunca llega. Una vez veía un spot súper potente donde una abuelita iba a una empresa de telefonía a preguntar por qué su aparato no sonaba, pensaba que estaba malo, pero no estaba malo. Lo que sucedía era que nadie se acordaba de ella (…) Que no se genere ese olvido es responsabilidad de los hijos. Si en definitiva es devolverles la mano a quienes nos criaron. Ellos se preocuparon de cuidarnos cuando éramos indefensos, en nuestros primeros años de vida, en mudarnos, en alimentarnos, en llevarnos al doctor y yo creo que tenemos que saber devolver la mano. Y no buscar un asilo donde ponerlos, eso no puede seguir sucediendo. No puede seguir existiendo el abandono”.