Embalses llegan a un histórico 78% de nivel de agua en la región de Coquimbo

Casi un 10% aumentó el nivel de embalsado de las principales estructuras hídricas de la región desde el último frente de lluvias que afectó a Coquimbo en mayo. Y es que aunque se anunciaba como un frente de mediana intensidad, el día lunes precipitó casi durante todo el día, dejando los embalses con un nivel histórico de 78% de su capacidad total.

Y pese a que las lluvias nuevamente dejaron algunos estragos en la cuarta región (donde la activación de quebradas y caminos cortados fueron los principales problemas), el agua fue bien recibida por los agricultores.

La seremi de Obras Públicas, Mirtha Meléndez, señaló a diario El Día que aún están catastrando los daños, sin embargo, destacó el nivel de embalsado de La Paloma, por ejemplo, que se encuentra con al 63% de su capacidad con 469,1 millones de metros cúbicos embalsados.

“Donde más se concentró el agua fue en la comuna de Elqui, en La Serena por ejemplo cayeron sobre 50 milímetros y en cuanto a los embalses ya estamos en un 78% de embalsado. Esto significa que con la nieve que cayó, lo más probable es que La Paloma, por ejemplo, logre un lleno total más avanzado el año. Por una parte estamos muy contentos. Tenemos asegurada la temporada agrícola para varios años”, explicó.

Cabe destacar que el embalse La Paloma inició su funcionamiento en julio del año 1967. Carlos Galleguillos, director regional de la Dirección General de Aguas señaló que su primer llenado se produce en octubre del año 1983 (con 748 mill. de m3), para volver a registrar el mismo volumen en diciembre de 1984, enero de 1985 y siendo el último con su máxima capacidad el registrado en el mes de noviembre del año 2002. Es decir, este año se cumplirían 15 desde que el embalse no logra el 100% de su capacidad.

MÁS DE MIL MILLONES DE METROS CÚBICOS GUARDADOS

La totalidad de las estructuras que guardan agua en la cuarta región, (ocho en total), ya totalizan mil catorce millones de metros cúbicos de agua embalsada.

Seis de ellos ya están en su máxima capacidad (La Laguna, Puclaro, Recoleta, Cogotí, Corrales y El Bato), tranques que suman un total de 545,41 millones de metros cúbicos.

Meléndez destacó la gestión precavida de los regantes que se prepararon antes de las lluvias amortiguando las crecidas, e hizo un llamado a administrar de manera eficiente de ahora en adelante el agua caída, para que efectivamente pueda durar varios años más.

“En invierno, los embalses llenos hay que manejarlos bien y es necesario amortiguar su crecida. El llamado a los regantes es a administrar bien para que en una posible próxima lluvia, no se tengan efectos hacia abajo”, dijo la seremi de Obras Públicas.

Agregó que los agricultores se han visto tremendamente beneficiados por las lluvias, el agua es el recurso que ellos más valoran. “Además, no ha habido grandes problemas en cuanto a crecidas de ríos que hayan podido inundar plantaciones. Donde sí hubo traspiés fue con las quebradas, que se activaron”, puntualizó.