El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) informó que en la Región de Coquimbo a la fecha se han detectado 5 focos de loque americana, una bacteria que es altamente mortal y afecta a las abejas. Éstos se están presentando en 2 apicultores en Elqui y Limarí, los cuáles se mantienen en cuarentena.
El director regional (s) de la entidad, Gonzalo Vega, explicó que esta enfermedad se consideraba exótica hasta el 2001 en Chile, luego en el 2004 empezaron a aparecer algunos focos en Atacama, con lo que pasó a ser endémica en algunas regiones de Chile. “En el 2007 se genera un plan de vigilancia apícola que es el que está vigente hasta el día de hoy y que nos permite tener una vigilancia activa de un número respecto del universo de apicultores en cada región”.
“Son muy termo resistentes, soportan el calor y temperaturas extremas, entonces, cada ciertas condiciones ambientales la bacteria puede diseminarse”, Gonzalo Vega, director regional (s) del SAG
La autoridad especificó que esta bacteria afecta a las crías (larvas) y puede tener una alta mortalidad dentro de las cámaras, en los marcos de la colmena. “Y lamentablemente desde hace unos años ya en la región a nosotros se nos ha ido presentando algunos focos”, precisó.
El primero de ellos se registró en la comuna de Los Vilos, en los sectores de Los Cóndores y Los Naranjos entre 2014 y 2015. “Los cuales se manejaron bastante bien, incluso en ese momento nosotros dimos la posibilidad a la Universidad del Desarrollo que probara un fármaco de origen natural para ver si existía la posibilidad de que bajara la infestación. No tuvo buenos resultados y al final el SAG terminó aplicando el procedimiento que está normado para el tratamiento de loque americana”, puntualizó. La preocupación ahora, dice, es que existen registros en Elqui y Limarí.
¿Por qué es tan complicada?
Gonzalo Vega detalla que lo más complicado de esta bacteria es que es muy resistente, pues genera unas esporas que pueden durar 30 años fácilmente “y son muy termo resistentes, soportan el calor y temperaturas extremas, entonces, cada ciertas condiciones ambientales la bacteria puede diseminarse”.
Como mata a las crías evita la reproducción, que la colmena se vuelva a poblar y genera pérdidas económicas, de material vivo y obviamente merma la producción del apicultor. “Podría llegar a terminar la población dentro de la misma colmena”, indica Vega.
30 años puede durar fácilmente esta bacteria y soporta temperaturas extremas.
El director del SAG señala que como entidad afortunadamente tienen procedimientos para este tipo de casos. De hecho, una vez que se tiene la sospecha de la presencia de loque americana se ponen los apiarios en cuarentena y se mandan muestras a analizar a los laboratorios que dispone el SAG.
En este caso, agrega, se trata de focos muy específicos (dos apicultores puntualmente) y una vez que se detecta esto por autodenuncia o a través del programa de vigilancia del SAG, “inmediatamente se cuarentena, se evita el movimiento, que es uno de los principales mecanismos de diseminación de la enfermedad”.
Los funcionarios del SAG han estado trabajando en los sectores donde se detectó la presencia de la bacteria, asesorando a los dos productores que presentan el problema. FOTO CEDIDA
¿Cómo se contagia?
La forma de contagio técnicamente se llama fomites, y se produce cuando el apicultor llega a revisar su colmena, la abre, la manipula y sin tener un manejo de bioseguridad, como cambiarse los trajes o sanitizarse, se mueve a otra colmena.
“Ese contacto entre material vivo o insumos que se utilizan al manipular una colmena pueden contaminar otra colmena y así poder mover la enfermedad dentro del apiario”.
“Podría llegar a terminar la población dentro de la misma colmena”, Gonzalo Vega, director regional (s) del SAG
En este sentido, aclara que no se da por el traslado de las abejas “la posibilidad de que se propague porque tenga contacto con otras abejas es muy baja, en loque americana se habla en Chile del número total de colmenas menos al 1% la posibilidad de contagio por esa vía”, puntualizó.
Generalmente, recalca, la infección está dentro de la misma colmena e incluso muchas veces ellas mismas la pueden controlar. “Las abejas tienen una condición autoinmune con la cual autorregulan la infestación dentro de la colmena. Pero cuando esto sobrepasa la capacidad autoinmune de las abejas, empiezan a aparecer los signos ya más crónicos de la enfermedad”, aclara.
Trabajo de concientización
Por su parte, el seremi de Agricultura, Rodrigo Órdenes, señala que la idea no es generar alarma en los productores, pero sí crear conciencia del cuidado que se debe tener respecto de esta enfermedad. “Muchas veces los apicultores se preocupan mucho, porque obviamente los puede afectar, pero creo que con estas capacitaciones y charlas vamos a mejorar”.
Tras la detección de estos casos, dice, han estado realizando un trabajo importante en las tres provincias para informar de la manera más rápida a los productores respecto de las acciones que deben seguir.
“Pero también estamos haciendo un llamado a que ellos sean bastante responsables en el tema de poder identificar o si tienen una sospecha de esta enfermedad poder dar aviso inmediatamente, porque tiene que ser declarada y reportada rápidamente al SAG, para que los profesionales puedan asistir y empezar a revisar la colmena y ver cuál es la situación y evitar también pérdidas económicas”.
410 apicultores, que suman un total de 2.148 apiarios y 55 mil colmenas existen en la región en la actualidad según los registros del SAG
Asimismo, indica Órdenes, están haciendo una convocatoria para que puedan inscribirse en el formulario de registro de apicultores y declaración de apiarios, pues esto facilita que el SAG les pueda prestar asesoría. “Hay que considerar que las personas que no estén inscritas tampoco pueden recibir apoyos del estado en función de que tienen que cumplir con esta normativa”, aclara.
Según datos que maneja la entidad, en la región a la fecha existen 410 apicultores, que suman un total de 2.148 apiarios y 55 mil colmenas.
Además el seremi señala que van a iniciar un ciclo de capacitaciones en las cuáles estará presente Mario Gallardo, que es un experto en apilcultura a nivel nacional “y es funcionario del SAG, para que él venga a explicar cuáles son las condiciones, la prevención y cómo debemos actuar en el tema de la presencia de esta enfermedad, principalmente para no generar expectativa de una emergencia”.
Cabe destacar que a la fecha a nivel nacional está identificado el foco en Atacama, Coquimbo, O’Higgins, Valparaíso, pero están en cuarentena.
Recomendaciones
El titular regional de Agricultura recalca es que lo importante en este caso es que los apicultores que tengan sospechas de que las colmenas puedan estar infectadas con esta bacteria den aviso de inmediato a los profesionales del SAG. “Cuando se detecta el foco, ellos inmediatamente emiten una resolución de cuarentena con la que se inmoviliza el apiario y no se puede trasladar ningún tipo de material a otros sectores”.
“Muchas veces los apicultores se alarman, porque obviamente los puede afectar, pero con estas capacitaciones y charlas vamos a mejorar”, Rodrigo Órdenes, seremi de Agricultura
Además se debe tener precaución con la venta la venta de material biológico o la venta de material inerte de las mismas colmenas. “Es importante que estén revisando los apiarios en caso de detección de algún síntoma o alguna sospecha informar rápidamente al SAG para que nuestros profesionales puedan asistir y ellos harán todo el procedimiento que corresponda”.
No utilizar antibióticos
Rodrigo Órdenes enfatizó además que los agricultores deben evitar la utilización de antibióticos por su cuenta. “Eso está prohibido, porque si parece alguna traza de algún producto activo dentro de la miel inmediatamente eso nos cierra algunos mercados de las exportaciones”.
Además, indica, no se ha demostrado que los antibióticos estén dando buenos resultados para poder controlar esta enfermedad “que es bastante compleja debido a las características de la bacteria”.
En este sentido, el director regional del SAG sostiene que se han percatado, en base a los relatos de los mismos apicultores, que ellos usan antibióticos como medida de prevención para evitar la enfermedad “y eso es totalmente errado, primero no hay ningún antibiótico hoy día que ataque loque americana específicamente, no está dentro del procedimiento SAG y está prohibido en Chile además. No es efectivo y al contrario, es una contraindicación su uso”, precisa. 3701iR
La importancia de las abejas
Los especialistas siempre han hecho notar la importancia que tiene la presencia de las abejas en la agricultura, porque son ellas las que contribuyen en el proceso de polinización. De hecho, el seremi Rodrigo Órdenes destaca que para producir una manzana de muy buena calidad se necesita que la flor sea visitada 65 veces por éstas.
“Por eso es muy importante el sector avícola para nosotros, lo estamos tratando de visibilizar más, es muy específico el trabajo que realizan las abejas principalmente en el trabajo de la fruticultura y por estamos tratando de organizar al sector apícola para poder trabajar en una visión más de futuro trabajando distintas líneas como sanidad, comercialización, exportaciones”, puntualiza.