Un llamado a la calma realizó este martes el seremi de Minería de la Región de Coquimbo, Roberto Vega Campusano, luego que creciera la preocupación ante el aumento de trabajadores contagiados de Covid-19 en faenas mineras del norte del país.
Y es que este miércoles se confirmó el tercer minero fallecido por coronavirus en la ciudad de Calama, comuna que fue sometida a una cuarentena debido a la fuerte alza de casos positivos que se ha registrado en dicha ciudad.
Ello motivó por ejemplo, a que Codelco anunciara la suspensión o reducción de sus operaciones, debido a los riesgos que genera el desplazamiento de personas hacia la Región de Antofagasta para mantener activa la extracción de los de yacimientos allá existentes.
Ante ello, el seremi de Minería, señaló que la situación de la actividad minera en la Región de Coquimbo en relación a la prevalencia del Covid-19 es muy distinta a la que se vive más al norte, asegurando que tanto las medidas de mitigación establecidas desde el mes de marzo en los yacimientos, así como la existencia de una mayor cantidad de mano de obra de origen local, y un estricto recuento de la trazabilidad de casos sospechosos, han permitido que la región tenga un porcentaje marginal de enfermos en dicha área productiva.
“Los números no mienten. Por ejemplo, de las más de 2 mil personas que están infectadas por coronavirus en la Región de Coquimbo, la tasa de personas vinculadas a la minería no alcanza a representar un 2%. Nosotros no tenemos más allá de 40 personas contagiadas en la minería”, sostiene la autoridad. “Básicamente han sido brotes muy puntuales que se han contagiado fuera de las faenas”, agrega.
Autocuidado y menor cantidad de personal
En ese sentido, Vega destaca las medidas de “autocuidado” que según él, han desarrollado los propios mineros de la región, en comparación a lo que se sucedió en Calama, por ejemplo.
“En Calama se mantenían aún abiertas las shoperías, la gente seguía circulando por las calles, entonces por muchas barreras y medidas de control que se tomaran al interior de las faenas, si no se respetaban cuando la gente iba a ser su vida normal, no iban a servir de nada”, sostiene el seremi.
De allí, que valorara que “los mineros de la Región de Coquimbo hayan entendido que no tienen que estar circulando. El propio cuidado que han mantenido los trabajadores de la región ha sido muy destacable”.
Respecto al flujo de trabajadores, Vega destacó que en la región hay una apreciable mayoría local, pero que al mismo tiempo, “se ha hecho una reducción fuerte, que en algún momento alcanzo el 60% de movilización a nivel regional. Hoy en día estamos en un 40%, es decir que de los 7 mil trabajadores de la minería, hay sobre 3 mil que no están trabajando, y no han sido despedidos ninguno de ellos”.
Parada de planta
El seremi Roberto Vega respondió además, a la negativa del alcalde de Illapel, Denis Cortés, quien se mostró contrario a la eventual llegada de 1.900 trabajadores a la provincia del Choapa, producto de una “parada de planta” de Minera Los Pelambres.
Ello, porque según el edil, este masivo arribo de personas, muchas de ellas desde fuera de la región de Coquimbo, se transformaría en un foco masivo de contagios por Covid-19 en comunas como Illapel, Salamanca y Los Vilos.
Al respecto, Vega explicó que desde Pelambres ya han aclarado la situación, señalando que “esta parada de planta es necesaria para poder mantener la continuidad operacional del yacimiento”.
“Para tranquilidad del alcalde estas 2 mil personas que eventualmente podría llegar -y no es ese el número-, no van a transitar por la comuna de Illapel. Acá lo importante es que el alcalde tenga claro que tiene cerrar los locales de entretención los cuales muchas veces, las personas que llegan a la parada de planta, concurrían a celebrar allí”.
La autoridad agregó además, que los trabajadores vienen con “una trazabilidad completa de quienes son las personas que van a venir. Tampoco es necesario hacer PCR masivos como el alcalde lo está solicitando. Por lo tanto, lo que tenemos que hacer es respetar las medidas de protección y evitar la vida social activa”.