Con aplausos de unos 70 pequeños empresarios se cerró la votación de la Cámara de Diputados en que se aprobó en primer trámite un proyecto de Reforma Tributaria. Aplausos de jóvenes emprendedores que no son del 1% más rico del país y que se sienten favorecidos por este conjunto de medidas.
Porque más allá de los slogan y de la frases estridentes, el proyecto de modernización tributaria que apoyamos en el Congreso es bien distinto a la propuesta original del gobierno, y con los aportes de la Democracia Cristiana logramos hacerlo pro pymes y pro empleo. Se trata de un proyecto que beneficia a más de 900 mil pequeñas y medianas empresas que van a poder acceder al régimen de contabilidad simplificada; que van a tener más capital de trabajo, porque va a permitir reinvertir sus utilidades y diferir el pago de impuestos, en tanto estas utilidades no sean retiradas. Un debate bastante técnico, pero que apunta a dinamizar la economía y generar empleo.
Dicen que esta Reforma beneficia a los más ricos, a los que se le va a devolver 800 millones de dólares producto de la reintegración. Pero no dicen que entre los beneficiados están 568 mil contribuyentes que ganan menos de 700 mil pesos -los que claramente no son del 1% más rico- y tampoco dicen que beneficia a 260 mil socios de pymes. La verdad completa es que el beneficio a los “súper ricos” es de 229 millones de dólares, pero al mismo tiempo aprobamos un sistema de compensaciones que apunta a recaudar 400 millones de dólares; bastante más de lo que considera el beneficio.
Además, la reforma tributaria que aprobamos en la Cámara de Diputados en primer trámite considera mayor recaudación en beneficio de las regiones, porque gracias a la Democracia Cristiana se va a destinar un 1% de todos los proyectos de inversión que se generen en la región, en beneficio de las mismas comunas y la regiones donde se genera la riqueza. También en beneficio de los adultos mayores que en más de 400 mil se van a ver beneficiados con rebajas en el pago de sus contribuciones, gracias a que nosotros pusimos estas condiciones para aprobar la idea de legislar.
Después de esta reforma tributaria el gobierno del Presidente Piñera no va tener excusas para no dinamizar la actividad económica, porque estamos entregando todos los instrumentos a las pymes, que son el motor de la economía, para que se pueda crecer nuevamente y volver a generar empleo.