Abogado de la madre de Melissa apelará a la prisión preventiva

Fue lo que se comentó durante toda la jornada. La audiencia de formalización de Mirta Ardiles (llevada a cabo el día miércoles), por el delito de incendio y parricidio en contra de su hija Melissa Chávez de 13 años, en los hechos ocurridos el 26 de noviembre del 2020, develó detalles terribles en relación a cómo se habría cometido el asesinato, presuntamente y de acuerdo a la tesis de la Fiscalía, por la mujer.

Tras la exposición del Ministerio Público, donde se mostraron las pericias científicas y también el análisis de cámaras de seguridad, se logró posicionar a la imputada como la única persona al interior del domicilio ubicado en el pasaje San Anacleto de Villa Talinay, en Coquimbo, al momento del brutal crimen, y, además, luego de analizar el arma homicida, se encontró el ADN de Ardiles en el mango del cuchillo, y, por otro lado, material genético de Melissa en la parte filosa.

Con esto, el relato previo de la madre que señalaba que había salido de la casa rumbo al dentista, dejando sola a la pequeña, se derrumbó por completo, y el magistrado Diego Rubí, del Juzgado de Garantía de Coquimbo, legitimó los antecedentes presentados que le parecieron del todo convincentes. Del mismo modo, sostuvo que el crimen que estaba presenciando era uno de los más terribles en los que le había tocado trabajar alguna vez, y estimó que la señora Mirta Ardiles era un peligro para la seguridad de la sociedad. Frente a ello, decretó prisión preventiva, por lo que la imputada deberá permanecer en el recinto penitenciario de Huachalalume, durante los 180 días que dure la investigación.

Poco rango de acción

El abogado defensor de Mirta Ardiles, Nicolás Pavez, tuvo poco rango de acción frente a la contundencia de la prueba, ya que no se le habría hecho llegar a tiempo la carpeta investigativa, la que conoció el mismo día en que estaba fijada la audiencia. De hecho, el penalista todavía pensaba que los antecedentes se mantendrían bajo reserva hasta el día 7 de febrero. Aquella molestia la manifestó durante el control de detención, argumentando que su representada habría quedado en una situación bastante desventajosa en términos legales producto de que él, no tuvo los antecedentes de la causa con anterioridad, para poder preparar una adecuada respuesta a la tesis entregada por los persecutores. A su vez, expresó que el Ministerio Público había focalizado todos sus dardos sólo en una dirección y no había apuntado al tercer sospechoso, el vecino de Melissa Chávez, quien solía “merodearla” y que había estado caminando por los techos del domicilio minutos antes. De igual forma, desestimó las aproximaciones horarias realizadas por la Fiscalía, aludiendo a que no eran exactas. Pero de poco le sirvieron sus alegaciones.

Preparan contraataque

Lo cierto es que, tras la formalización, el abogado Nicolás Pavez, quien se encuentra en la zona junto a los familiares de Mirta, quienes, por cierto, siguen confiando en su inocencia, no hizo declaraciones, y el día de ayer se mantuvo en esa postura, sin embargo, precisó que apelarán a la prisión preventiva dentro del plazo legal (cinco días corridos una vez decretada).

Se desconocen los argumentos que presentará, pero sería una tarea bastante compleja de acuerdo a los abogados consultados para esta nota. De acuerdo a la profesional del PAV (Programa de Atención a Víctimas de la Subsecretaría de Prevención del Delito), María José Duarte, quien representa al padre biológico de Melissa Chávez, don Denis Chávez, “en general, en prácticamente todas las causas los abogados defensores presentan modificación o término de las medidas cautelares como la prisión preventiva. En este caso, el tribunal consideró necesaria esta cautelar por el peligro que representaría para la sociedad la imputada”, manifestó Duarte.

Respecto a si le ve buen término a este recurso, prefirió no aventurarse, ya que ella es parte del proceso, y tampoco tiene mayores antecedentes en relación a los argumentos que esgrimiría Pavez.

Quien sí entregó su apreciación jurídica desde afuera, fue el abogado penalista Carlo Silva, que ha seguido muy de cerca este caso. Es categórico, y sin rodeos expresa que “ve pocas posibilidades”. Esto, viéndolo desde el punto de vista del derecho, y sin adoptar posturas. “Cuando tú vas a apelar, lo que se discute primero es si existió el delito, y aquí claramente existió, por tanto, ese debate estaría zanjado, y no favorece lo que está pretendiendo la defensa. La segunda condición que se puede discutir tiene que ver con la participación penal de la imputada, que es la que yo creo, él ocupará, pero aun así pienso que tiene pocas posibilidades”, expresó.

En relación a lo anterior, resultaría difícil debido a la contundencia de la prueba presentada, que efectivamente acredita la participación de la madre de Melissa en el crimen contra su hija. “Se logró situar a la persona en el lugar gracias a las cámaras de seguridad, eso, por un lado, y, por otra parte, existen las pericias científicas, que son complejas de objetar”, aseveró Silva, agregando que existe un tercer elemento que debería discutirse que es la necesidad de cautela. Aquí, también el camino está cuesta arriba. “En este punto tenemos que analizar las penas posibles asignadas a los delitos imputados, y en este caso los delitos tienen penas que podrían llegar incluso a cadena perpetua, por tanto, no tiene ningún sentido que mientras dure el proceso ella esté libre ella esté en libertad. En el fondo, se hace una proyección negativa de la posibilidad de condena. Por tanto, escuchando al magistrado, viendo la prueba científica, yo le veo una nula posibilidad”, declaró, tajante el abogado.

Familias entre el dolor y la incertidumbre

Mientras el proceso avanza en materia penal, y trascurren los 180 días que se han dado como plazo de investigación, las teorías respecto a las oscuras motivaciones que habría tenido la madre de Melissa Chávez, para cometer el asesinato –si así se comprueba- proliferan, aunque todavía no existe nada establecido. Se habla desde una eventual psicopatía, e incluso se desliza una hipótesis respecto de posibles celos que tendría la madre hacia la hija producto de la cercana relación que mantenía la niña con el padrastro. En este punto, cabe consignar que el individuo registra una denuncia por abuso sexual en contra de la víctima fallecida el pasado 26 de noviembre, la cual se archivó. Pero el móvil todavía no se puede precisar y será en el transcurso de las indagatorias cuando vayan apareciendo detalles que permitan dilucidar qué era lo que ocurría al interior de esa casa, en el núcleo familiar.

Eso sí, pese al terrible relato del Fiscal regional durante la audiencia de formalización, familiares directos de Mirta Ardiles, y también por parte del padre de la menor, confían en que la mujer es inocente. Una de sus hijas, hermana de Melissa, ha declarado ante los medios de comunicación: “Confío en mi mamá, sé cómo era su relación con mi hermana y eso me tiene tranquila. Jamás vi algo de malo de mi mamá en contra de mi hermana”.

Donde el dolor también es inconmensurable es en la familia paterna. El padre biológico, Denis Chávez, ha debido intensificar su tratamiento psicológico ya que el impacto de conocer de la detención de Mirta agudizó el estado de decaimiento permanente en el que se encontraba desde que perdió a Melissa.

Gina Chávez, hermana de Denis y tía de Melissa conversó con El Día, y se mostró sorprendida. “Tenemos un dolor todavía más grande ahora, porque por un lado está el dolor que significa el haber perdido a nuestra niña, y ahora el no saber si una persona (Mirta) en la que tú confiabas, tiene algo que ver, porque es obvio que ahora se te generan un montón de dudas. Quieres confiar y tienes esperanza, pero tampoco hay que ser ciego ante las cosas”, expresó Gina, quien también está a la espera de que el proceso culmine, que exista justicia y que los responsables paguen. Sin embargo, afirma que, “siempre tenemos en cuenta que el dolor y la pena más grande ya la vivimos, y fue la muerte de Melissa, después de eso, nada puede ser peor”, asegura.