Eran pasadas las 21:30 horas del viernes 28 de agosto cuando Rodrigo Jofré (36) salió desde su emprendimiento de sushi ubicado en el sector de Nova Hacienda, que estaba levantando junto a su señora y otro socio. A bordo de su motocicleta, llevaba un pedido al sector de Tierras Blancas, pero nunca llegó a su destino.
La tragedia se interpuso en el camino y en la vida del ingeniero civil coquimbano. Cuando pasaba por la intersección de Avenida Eduardo Frei Montalva con calle Talca Sur, en la comuna puerto, por motivos que se investigan, una camioneta lo atropelló para luego, el conductor, darse a la fuga sin prestar socorro a la víctima que quedó agonizando a un costado de la acera. Rodrigo moriría minutos más tarde, lo que fue constatado por personal de carabineros de la subcomisaría de Tierras Blancas, quienes hallaron el cuerpo sin signos vitales.
Un puzzle policial
Pese a que en un comienzo se hablaba de un accidente, producto de la pérdida del control de la motocicleta por parte del fallecido, gracias a los peritajes realizados por la SIAT (Sección de Investigación de Accidentes de Tránsito) de Carabineros se pudo establecer que se trataba de un atropello, lo que ya está confirmado. Sin embargo, con el pasar de los días fueron surgiendo nuevas interrogantes, precisamente cuando se pensaba que el caso comenzada a esclarecerse.
De acuerdo al abogado Carlo Silva, representante de la familia de la víctima, ya se presentó una querella, por ahora, contra quienes resulten responsables del atropello con resultado de muerte. Y es que aunque existe un presunto autor confeso que se entregó a la policía, a juicio del profesional, los antecedentes son suficientes para dudar de que esta persona efectivamente sea quien iba conduciendo la camioneta al momento del atropello.
“Esta persona, propietaria del vehículo, se presentó voluntariamente ante carabineros, pero creemos que no es el conductor que iba al volante esa noche. ¿Por qué? Porque el relato que le entrega a la SIP (Sección de Investigación Policial) de Carabineros, no es compatible con la dinámica del accidente”, aseveró Silva, agregando que, a partir de estas dudas, la policía continúa investigando y el sujeto que se presentó a declarar sólo habría quedado apercibido.
“Lo que tenemos hasta ahora, es que al parecer estaría encubriendo al verdadero conductor causante del accidente que sería un cercano o familiar, el que la policía ya tendría identificado”, aseveró el abogado.
Cercanos devastados
Mientras las acciones legales y la investigación siguen su curso, la familia y los amigos del ingeniero y emprendedor porteño están devastados. Diego Burlé, socio y amigo de Rodrigo, da cuenta de la calidad personal de la víctima quien deja a dos hijos –uno de 15 y otro de 2 años- y una pareja con la que mantenía una relación de convivencia por casi una década.
“Nunca había conocido a una persona tan trabajadora y tan solidaria”, expresa de entrada Diego, quien enfatiza en que durante la pandemia, por ejemplo, había estado prestando ayuda por cuenta propia y de manera totalmente anónima a gente de la Parte Alta de Coquimbo y también a comunidades inmigrantes que lo estaban pasando mal.
“Era de los que pasaba por la calle, veía a un viejito, lo saludaba y después se hacía amigo y lo seguía ayudando. Fui testigo de eso, y a mí en lo personal también me ayudó cuando lo necesitaba. Estaba sin pega, e iniciamos este emprendimiento junto a su señora asesorados por él, que también hacía los repartos cuando eran más lejos. Paralelo a eso seguía su trabajo en faenas porque trabajaba en minería. O sea, estamos hablando de un tipo que se levantaba a las siete de la mañana y terminaba toda su pega a las 02:00 de la madrugada, ese era su ritmo y todo por su familia”, expresa, un apenado amigo y socio de la víctima.
Desde su familia, su hermana Diana y su pareja Elizeth, todavía no asimilan el hecho, y no pueden creer que “su gran protector” haya partido por la irresponsabilidad de un tercero y que además “se esté tratando de encubrir al responsable”. Por lo mismo, según asegura Diana, llegarán hasta las últimas consecuencias para hacer justicia. “Ha sido un golpe demasiado grande. Nuestra familia es muy unida y en buena medida era Rodrigo el que se encargaba de mantenernos así. Él vivía preocupado de sus hermanos, sus papás y obviamente de su señora y sus hijos. Era alguien que estaba trabajando todo el tiempo, pero no para él, para los demás, para su familia, y la gente lo ve así, por eso que esto ha generado tanto impacto y hemos tenido apoyo en las redes sociales”, aseveró la hermana menor de Rodrigo.
Elizeth, su compañera de vida, también está clamando por justicia. Encuentra fuerza en sus hijos cuando siente que ya no puede más de la pena, pero aun así pasará mucho tiempo, o “toda la vida” antes de que pueda recuperarse. “Es difícil imaginar la vida sin él. Era nuestro pilar, quien nos protegía y estaba ahí siempre. Ahora mismo, nos estaba ayudando con el emprendimiento del sushi, me motivaba y apoyaba siempre”, relata Elizeth, evidentemente afectada.
Carabineros
Se trata de una investigación en curso, por lo que no se pueden entregar mayores antecedentes. Consultados, desde Carabineros confirmaron que “tras una serie de indagatorias y pericias, personal de la SIAT Coquimbo logró identificar a un hombre como presunto autor del atropello a un motorista el pasado 28 de agosto en Tierras Blancas. El individuo, se entregó el lunes de forma voluntaria a la policía. Sin embargo, la SIAT continúa realizando investigaciones relacionadas al proceso según los requerimientos del Ministerio Público”, indicaron por escrito.