Un nuevo hecho de sangre enlutó a una familia y marcó otro complejo fin de semana en la Región de Coquimbo, que durante los últimos meses ha sido testigo de asaltos, delitos violentos e incluso enfrentamientos por parte de bandas y pandillas
Esta vez los protagonistas no fueron agrupaciones delictuales, pero el hecho mantuvo en vilo a la población durante toda una noche y hasta horas de la madrugada.
El crimen se sitúa en el pueblo de Islón, en la comuna de La Serena. Eran pasadas las 23 horas del sábado y Bernardo Leyton, de 48 años, cruzó la calle desde la casa de su madre hasta la suya cuando, por razones que están en plena investigación, fue atacado con un arma cortante por parte de una vecina.
El hecho desencadenó un enfrentamiento que, según comentan familiares de la víctima, habría terminado con cinco personas lesionadas por la imputada.
El hombre perdió la vida en el lugar y personal de la Sexta Comisaría de Carabineros (Las Compañías) atendió el procedimiento, para comenzar a esclarecer lo sucedido, ya que las razones del crimen, hasta la tarde de este domingo seguían en duda.
Pero la noche no terminó ahí, ya que los problemas habrían continuado hasta cerca de las 5:00 de la madrugada. Según datos entregados por la institución policial, en segundo momento de tensión ocurrió cuando cercanos al fallecido habrían agredido a la victimaria, “con golpes de puño y disparos de escopeta”, según detalla la información oficial.
La mujer habría sido trasladada a un centro asistencial, desde donde fue derivada al Hospital de La Serena, donde la tarde de ayer permanecía fuera de riesgo vital, pero con diagnóstico de gravedad. En total, serían 15 las personas que habrían estado involucradas en las agresiones, de uno y otro lado.
Tesis de rencillas anteriores
El fiscal de turno dispuso la concurrencia de la Brigada de Homicidio de la PDI para hacerse cargo de las diligencias de investigación que permitirán reconstruir lo ocurrido y clarificar la dinámica y las circunstancias del hecho.
Según la información preliminar manejada tanto por Carabineros como por la Policía de Investigaciones, existirían rencillas anteriores entre los individuos. Los primeros informes hablaban de una “riña familiar”, lo que fue descartado por el círculo cercano del fallecido.
El Día se contactó con una de las sobrinas de Leyton y la joven relató que la imputada habría llegado hace cerca de un año al sector. Además afirma que no tenían mayores problemas con ellos.
Sí reconoce un inconveniente que su tío habría tenido con un hijo de la mujer, luego que este fuera a encarar a la familia, a la casa de su abuela, por un vehículo que supuestamente obstruía el paso. “El hijo de ella había golpeado la puerta a mi abuelita. (...) Mi tío le dijo que no quería problemas con él y que no la molestara porque es enferma del corazón. Pero fuera de eso, nada”, sostiene.
Sobre lo ocurrido la noche del sábado, la sobrina del fallecido sostiene que no se explica el actuar de la mujer. “La señora se le tiró a mi tío, lo intimidó y le enterró al cuchilla en el corazón. (...) Estaba como endemoniada, se le tiró de una manera que no puedo explicar”, agregó.
La joven además, niega que su familia haya tenido relación con la agresión a la mujer que informó Carabineros. Desde la PDI indicaron que hasta el cierre de esta edición no existía denuncia por parte de la presunta involucrada, “ni por lesiones ni por ningún otro delito” y confirmaron que actualmente no se encuentra detenida en cuarteles de la policía civil.
Los detectives de la Brigada de Homicidios se encuentran recabando antecedentes y comenzando con las indagatorias. Por lo pronto, trabajan en la tesis de las rencillas anteriores y en cuanto a la dinámica de lo ocurrido, se realizan pericias por parte del equipo de del Laboratorio de Criminalística.
Los detectives y peritos acudieron al sitio del suceso y al consultorio Raúl Silva Henríquez, donde para examinar el cuerpo de Leyton. “Al examen externo del cadáver, se estableció que mantiene una herida producida por un arma cortante y que su data de muerte sería de 4 horas. Los detectives continúan las diligencias tendientes a establecer la dinámica de los hechos, las circunstancias y a los responsables del mismo”, indicaron desde la institución en horas de la tarde de este domingo.
“Estamos impactados, nunca nos había ocurrido algo así”, indicó la sobrina de la víctima, agregando que esperan “que se haga justicia”.
Se trata del segundo hecho de sangre que se registra en prácticamente un mes en el pueblo Islón. Durante los primeros días de diciembre un hombre de 66 años fue amordazado, maniatado y quemado vivo, en un enigmático caso que sumó entonces el quinto crimen regional en 10 días y que aún es investigado por la PDI.
Disparo a quemarropa en Coquimbo
En Coquimbo también se registró un grave ataque que pudo terminar en una nueva tragedia y que preocupa por la crudeza con la que actuaron los involucrados.
Todo sucedió a raíz de una fiesta en el sector de la Parte Alta el domingo 3 de enero. Ese día, un joven de 19 años de edad había sido víctima del robo de su teléfono celular. Un hecho que no dejó pasar y que tuvo consecuencias.
Recientemente se habría enterado de quién fue la persona que sustrajo el aparato en la celebración y coordinó un encuentro por redes sociales para recuperarlo.
Según la información que maneja la PDI, los involucrados se reunieron en la intersección de calle Lago Peñuelas con Reserva Nacional Lauca, en el sector de Bosque San Carlos.
Al encarar al sujeto y exigirle la devolución de su teléfono, el joven sufrió un disparo a quemarropa en el rostro. Herido por el arma de fuego, la víctima ingresó al Hospital San Pablo con lesiones graves en el globo ocular derecho, aunque fuera de riesgo vital.
“Los peritos del Laboratorio de Criminalística realizaron el procedimiento en el sitio del suceso dentro de las primeras diligencias de análisis criminal e inteligencia policial, para individualizar al presunto autor del disparo con arma de fuego y ponerlo a disposición de la justicia”, indicó el comisario Claudio Alarcón, jefe de la Brigada de Homicidios de La Serena.
Dos persecuciones: Control preventivo y un asalto
De vuelta en La Serena, los funcionarios de Carabineros debieron enfrentarse a dos incidentes en la carretera.
El primero de ellos fue la evasión de un control preventivo en el sector de Cuatro Esquinas en La Serena.
Según lo detallado por la institución, a las 18:20 horas un individuo hizo caso omiso de la orden de detenerse al llamado policial y terminó escapando, poniendo en riesgo la vida de los uniformados, a quienes habría intentado atropellar.
El hecho produjo que los carabineros hicieran uso de su arma de servicio, impactando en la ventana del copiloto del vehículo, lo que no impidió que este continuara su escape.
Finalmente el sujeto fue alcanzado y los uniformados lograron su detención en el kilómetro 469 en la ruta 5. El conductor pasó a control de detención por el delito de atentado contra la autoridad y Labocar se encuentra realizando las pericias del caso. El hecho terminó sin lesionados.
El segundo acontecimiento fue en horas de la noche, también en La Serena, y su dinámica fue un poco más compleja. Todo ocurrió luego de un asalto a un servicentro, que encendió las alertas de Carabineros.
Esta vez la persecución partió en Regimiento Arica y terminó en Colon con Pedro Pablo Muñoz, en el centro de la capital regional. Sin embargo, antes de ese destino final ocurrió el enfrentamiento más peligroso.
Cuando transitaban por Avenida Pacífico con Cruz del Molino, tres de los cuatro ocupantes del vehículo dispararon contra personal de la Primera Comisaría, quienes atendieron el procedimiento.
En respuesta, los carabineros hicieron uso de su arma de servicio y se cruzaron a disparos con los antisociales.
El hecho terminó sin lesionados y los policías lograron capturar al individuo que no logró bajarse del auto, deteniéndolo por el delito de robo con violencia.