La región de Coquimbo fue la pionera en la realización de Diálogo Regional Coquimbo, una iniciativa que se busca realizar en todas las regiones del país. En este primer encuentro los cinco exponentes analizaron el panorama que se vive en la región en cuanto a la descentralización y la forma en que se ha enfrentado la crisis sanitaria.
Darío Molina, ex Gobernador de la Provincia del Limarí expuso que no solo se está viviendo una crisis, sino tres “que han golpeado a nuestro país y que convergen y generan la tormenta perfecta”.
La primera de ellas se refiere al estallido social que se vivió en el mes de octubre del 2019, la segunda es la crisis que vive la clase política y, por último “nos llega la pandemia y eso genera una situación de preocupación en todas las regiones del país, pero el centralismo hace que estén atadas de mano y que esa situación haya ido empeorando”, precisó.
Cristóbal Reyes, presidente Regional de Revolución Democrática, fue enfático en señalar que el Covid-19 había intensificado aún más lo que lo que el estallido social había dejado al descubierto, “no era una horda de delincuentes, era más bien un malestar hacia el centralismo, presidencialismo y la falta de participación”.
En ese mismo sentido advirtió que el rol de lo local toma mayor realce y “la ideología del Gobierno ha hecho a la economía y a la salubridad como contrapuestos y más bien la estrategia debería ser conjunta”.
Por su parte la trabajadora social y docente de la Universidad Católica del Norte, Alejandra Navea, explicó que la pandemia llegó en medio de un clima de desconfianza de la institucionalidad y con demandas civiles de participación social.
Articulación de actores
Una de las principales críticas que ha recibido el Gobierno a nivel nacional, es sobre las medidas adoptadas para el control de la enfermedad, las que han sido cuestionadas por la población por estar basadas en la realidad del centro y no de todo el país, ignorando la voz los expertos y de los propios municipios en la toma de decisiones.
“Hay que estar de acuerdo que la estructura nivel país restringe mucho la capacidad de la región, ya que el Gobierno Regional es la voz del centro en la región y no viceversa, esa es una cuestión que no se puede subsanar sino es constitucionalmente”, precisó el presidente regional de Revolución Democrática.
Ante esto Claudio Ibáñez, ex intendente de la región catalogó las estrategias del Gobierno como “errada” y que “representan lo peor de la derecha, excluyente y que no entiende la democracia y la ve como una amenaza. Hay que tomarse enserio la pandemia, tomar estrategias como el testeo, trazabilidad y aislamiento que es la más exitosa”.
Uno de los temas que fue abarcado por el ex intendente Ricardo Cifuentes fue la entrega de la caja de alimentos en la región de Coquimbo, en donde algunos lo tildan como intervencionismo electoral.
“En el medio de una pandemia se sacó al municipio en la labor de distribución de esas cajas, hoy día hay un administrador regional que está cuestionado por comprarle a una empresa que había cambiado el rubro el día anterior. Esto se va a transformar después de la pandemia en un escándalo nacional. Hay un descontrol absoluto y eso pasó porque se trató de saltar al municipio de este rol”, explicó.
La pedagoga de la UCN admitió que una de las decisiones más centralistas ha sido la designación de una delegada presidencial, “no estoy desconociendo las habilidades de Andrea Balladares que tiene para ejercer el cargo, pero estoy convencida que, en nuestra región, hay otras personas iguales o mejor capacitadas para asumir esta responsabilidad y representar nuestro territorio”.
Desafíos post pandemia
Finalmente en la jornada los presentes entregaron algunas propuestas sobre cómo se podría superar de mejor manera la crisis sanitaria.
“El futuro hay que ir generándolo con medidas transparentes, lo más participativas posibles, transversales y consensos que nos permitan una gobernanza multinivel que permita articular el nivel central, lo regionales y comunales de mejor forma” señaló Reyes.
Ante esto el ex intendente admitió que parte de la respuesta para enfrentar esta pandemia era la descentralización, “darle autonomía financiera que permitan que las regiones tomen sus propias decisiones, que adoptemos políticas que impliquen una participación y que el Gobierno no tenga temor a escuchar las voces de la calle y de los expertos”, enfatizó Ibáñez.
Del mismo modo Alejandra Navea argumentó que un tema que no puede esperar al fin de la pandemia era el liderazgo que debían tener las autoridades regionales para implementar políticas públicas acordes a la realidad y situación actual de la región.