La festividad de La Pampilla es única. Pocos entienden cómo una actividad que se desarrolla en medio de una planicie dominada por la tierra, despierta tanto fanatismo entre las familias porteñas. Causa extrañeza que en los primeros días de septiembre ya existan decenas de carpas y cientos de terrenos marcados. Pero así es este evento que este 2012 amenaza con extenderse hasta el domingo 24 de septiembre.
Este año dentro de las novedades está la habilitación de una serie de miradores para Carabineros en diferentes puntos de Coquimbo que se habilitó para mejorar el aspecto de seguridad.
Además, desde el municipio se informó que alrededor de 150 mil litros de agua apta para el consumo humano se están distribuyendo en camiones algibes.
Las máquinas con personal municipales recorren los diferentes sectores de La Pampilla para entregar el vital elemento.
Asimismo, nuevamente el personal de la Cruz Roja desarrolla un trabajo clave en beneficio de los asistentes.
Además, fuentes municipales indicaron que desde el sábado hasta el lunes no se habían registrado detenidos por delitos de fuerza. “En materia de orden público ha estado todo tranquilo”, aseguró el Mayor Andrés Arena.
Cabe destacar que en esta fiesta debutaron los brazaletes para los menores y evitar con ello la pérdidas de niños.
En materia de limpieza el municipio prevé el retiro de 168 toneladas de basuras durante los días en que se extienda la fiesta.
En esta ocasión se dispusieron 6 contenedores para la recolección de los desperdicios que se acumulan en el lugar.