Dolor y rabia en joven madre tras “baja condena” al causante de la muerte de su familia

Finalmente llegó el momento de la verdad. Luego que el lunes se declarara culpable a Felipe Andana Marín (34) por los delitos de accidente de tránsito con resultado de muerte y no prestar ayuda o socorro en el sitio del suceso, el Tribunal de Oral en lo Penal de La Serena dio lectura a la sentencia que deberá pagar este sujeto tras las rejas.

La magistrada Nury Benavides fue quien dio a conocer el dictamen que terminó condenando al acusado a la pena única de 5 años de presidio menor en su grado máximo y al pago de una multa de 8 UTM. A lo anterior, se sumaron otros 4 años de presidio menor en su grado máximo por el delito de omisión al no detener la máquina, auxiliar a los heridos y dar cuenta a la autoridad de lo ocurrido, y una multa de 11 UTM, totalizando 9 años de presidio y 19 Unidades Tributarias Mensuales. 

Querellantes no están conformes

Cabe consignar que los hechos que dieron lugar al juicio oral y a la consecuente condena datan de la madrugada del 27 de abril del 2019, cuando un trágico accidente provocado por Andana Marín quien conducía en estado de ebriedad, destruyó para siempre a la familia Garrido-Traipe, de Las Compañías.  

El vehículo en el que se desplazaban Yoselin Traipe, su marido y sus dos hijos, fue impactado de frente por la camioneta conducida por el sujeto en estado intemperante. Los resultados fueron fatales. El padre de familia, Miguel Garrido, chofer de la línea 39 de colectivos, murió instantáneamente, mientras que los dos menores, Mery Danae, en ese momento de 8 años, y Jean Pierre (13) salieron eyectados quedando gravemente heridos. Horas más tarde, Jean Pierre falleció en el Hospital San Pablo de Coquimbo. Mery Danae continúa luchando de la mano de su madre, Yoselin.

Tras conocer la sentencia del tribunal, las reacciones de ambas partes no se hicieron esperar. El abogado querellante, en representación de Yoselin Traipe y su familia, Raúl Castillo, no quiso adelantar si presentarán algún recurso al respecto, pero claramente no estaba conforme con lo dictaminado por los jueces ya que no se consideró la reincidencia del individuo con lo que las penas podrían haber ascendido hasta los 15 años y no a los 9 que finalmente se le dieron. De todas formas, Castillo asegura que el fallo se ajusta a derecho.

“Se desechó la agravante de reincidencia por el transcurso del tiempo, entonces corresponde aplicar las normas ajustadas a la ley de tránsito. Además, si se le reconoce la colaboración sustancial, la ley establece un tope máximo de 5 años por el primer delito (accidente con resultado de muerte), así que, bajo ese criterio, la sentencia es correcta. Ahora, para mí, para la afectada y para la sociedad en general resulta injusta, pero fue el criterio que los jueces utilizaron”, sostuvo Castillo.

Defensa insiste en nulidad

Pese a que la defensa logró que la pena fuese seis años menos de lo que exigía la parte querellante y el Ministerio Público quienes estaban solicitando 15 años, de todas formas, tal como lo anunciaron después del veredicto, recurrirán para anular el procedimiento. Así lo consignó el abogado Carlo Silva.

“Nosotros mantenemos la misma posición, que es una reclamación de fondo en el sentido de que mi cliente no debió haber sido condenado, pese a ser responsable, por un tema de legalidad y formalidad en la que se tomó el procedimiento. Sería ilógico que nosotros durante todo el proceso hayamos estado reclamando esta situación de ilegalidad, y que ahora último la abandonemos. Creemos que aquí debe pronunciarse la Corte Suprema en relación a si existió una infracción a las normas del proceso”, sostuvo Silva.

Pero, ¿en qué se basaría el recurso de nulidad? De acuerdo a la hipótesis del penalista, Carabineros tomó declaraciones a familiares de Felipe Andana, sin advertirles que, según refiere la ley, no están obligados a entregar sus testimonios debido al vínculo cercano con el imputado.

Ambas partes tienen un plazo de 10 días corridos desde la lectura de la sentencia –ayer 21 de noviembre- para presentar cualquier recurso referido a la resolución emanada del Tribunal Oral en lo Penal de La Serena.

"Es algo aberrante"

Con pena, rabia e impotencia Yoselin Traipe recibió la noticia de que los jueces no ponderaron la reincidencia del individuo al momento de resolver. “Es algo aberrante, ya los 15 años eran poco, imagínese ahora 9 años, no es nada en relación al daño que hizo”, comentó la mujer en contacto telefónico momentos después de la lectura de la sentencia. 

Previo a ello, el viernes, Diario El Día estuvo en su casa, donde nos relató cómo vivió este proceso, lleno de dolor. Si bien sentía algo de tranquilidad al saber que la justicia declaró culpable a Felipe Andana Marín, todavía tenía incertidumbre respecto a las penas que podía tener y que fueran demasiado bajas, teniendo en cuenta que este hombre le quitó todo lo que tenía. Finalmente, su miedo se hizo realidad.

Sentada en un sillón, en medio del silencio de su living, decía no entender “la indolencia con la que actuó este sujeto”. Claro, durante el juicio se enteró que incluso tuvo tiempo para cambiarse de ropa antes de que fuera capturado por la policía, sin embargo, no fue capaz de detener su vehículo y prestarles ayuda tras el accidente. “Pidió socorro para él, para zafar del delito que había cometido, pero nosotros no le importamos nada. Yo nunca vi una muestra de arrepentimiento de su parte. Nada me va a devolver a mi hijo Jean Pierre ni a mi esposo Miguel, ni tampoco la salud de Mery, pero escuchar una disculpa creo que correspondía, independiente de lo que se resolviera después. Creo que quedó demostrado la clase de persona que es”, expresó.

Le cuesta hablar sin quebrarse, y es entendible. Sin embargo, asegura que expresarse le sirve como un desahogo. Afirma que lo más doloroso durante el proceso fue el tener que escuchar detalles de lo que sufrieron su marido y su hijo antes de morir, por lo mismo, tomó la decisión de no estar presente en todos los alegatos. Cada vez que, por motivos técnicos, durante la exposición de las pericias se daban a conocer posiciones, heridas y eventos probatorios de ese tenor, no lo podía soportar, y optaba por apagar el audio o simplemente retirarse. 

"Queríamos cadena perpetua"

“Yo le daría cadena perpetua. Él es una persona que representa un riesgo para la sociedad, esta no era la primera vez que manejaba en estado de ebriedad y tenía un accidente, y ahora fue con consecuencias fatales. Si sale, lo hará de nuevo”, expresaba Traipe, antes de la sentencia. En ese momento, según decía ella misma, había guardado su dolor en una caja, tal como debe hacerlo todos los días, de lo contrario “andaría todo el día llorando y no podría atender a mi hija”, manifestó.

Con mucho dolor, Yoselin expresa que sólo por ella se mantiene en pie, y que, si no estuviera, o si le llega a pasar algo, la vida perdería todo su sentido. “Yo aquí no existo. Primero está Mery, segundo Mery, y tercero Mery”, afirma. Y claro no puede despegarse de ella y durante todo este año y medio ha sido un peregrinar constante entre pasillos de hospitales tanto en Santiago como en la región. “Perdí la cuenta de las veces que la han tenido que operar. Creo que son más de 20 veces y cada vez que entra al pabellón estoy corriendo el riesgo que se me vaya. Es algo que no se puede explicar. Mi esperanza hoy en día está en poder obtener un cupo para una rehabilitación intensiva en un recinto público, lo que es muy difícil, porque lo otro es hacerlo en el sistema privado, pero no cuento con los recursos”, relata.

Complicaciones económicas

El tema económico ha sido un factor que suma otra preocupación. Yoselin no ha podido volver a trabajar y si bien en un principio recibió muchas ayudas, incluso desde el Gobierno, hoy en día la realidad es otra. La mayoría de los que estuvieron en un principio para darle apoyo y que sustentara sus necesidades básicas desaparecieron. De hecho, hoy vive de la pensión de su marido fallecido, poco más de 80 mil pesos, y de las rifas que realiza a través de Facebook Live.

“Me ha costado bastante. No creo que nunca pueda volver a trabajar porque tengo que estar al lado de Mery y así no puedo generar recursos. Al principio la gente estaba, pero con el tiempo es entendible que vayan olvidando. Y encima se sumó la pandemia, que no me ha permitido hacer eventos más grandes como el Café Concert que hicimos el año pasado antes de todo esto, donde nos fue muy bien”, remarca.

La soledad

No niega que hay momentos del día en que piensa en lanzar todo por la borda. “Me siento muerta en vida, este tipo me dejó sola”, afirma, entre lágrimas, agregando que sólo la imagen de Mery Danae la mantiene con fuerza.

“Es muy difícil, muy difícil, piensa en que yo tengo 34 años, había logrado construir una familia, pero esta persona me quitó todo eso. Esta casa hasta antes del accidente estaba llena de alegría, con los niños jugando. Mery bailando, pero ahora es esto que tú vez, soledad, silencio y mucha pena. Uno tiene la esperanza de que cuando terminan estos procesos judiciales va a cerrar el ciclo, pero ese ciclo al final yo no lo voy a poder cerrar nunca, hasta que vea a mi niña levantarse, y los médicos me han dicho que las posibilidades de que eso ocurra son una en un millón”, asevera, Yoselin quien pese a la sentencia, sigue clamando por una justicia que, asegura, los tribunales no le dieron.