Hace seis años que la vida de la señora Norma Lobos cambió para siempre. La mujer de 77 años, comenzó a sufrir los primeros síntomas de Alzheimer, enfermedad que se ha ido desarrollando y que la ha hecho perder por completo su autovalencia.
Hoy vive con su hija mayor, en el pequeño poblado de El Progreso, en Tambillos, comuna de Coquimbo, y su situación empeora cada día más. Así lo relata precisamente Loreto Galleguillos, quien la mantiene a su cuidado, pero asegura, “la situación ya se ha vuelto insostenible”.
Los recursos simplemente no alcanzan y la señora Norma necesita cuidados especiales.
“Yo la amo, es mi madre y aquí está corriendo un riesgo tremendo. A veces se arranca, y no podemos encontrarla, ya no nos reconoce, ni reconoce su casa. Eso, por un lado, y por otra parte, no podemos costear todo lo que a ella le hace falta, sólo mi marido trabaja y con un sueldo mínimo criar a dos hijas y tenerla a ella es muy complicado, por eso necesitamos que alguien nos ayude”, dice Loreto, cuya madre lleva cerca de un año en lista de espera en un centro residencial para adultos mayores. “Si de mí dependiera yo la tendría conmigo, pero mi realidad me lo impide”, agrega.
Un caso que se repite
El caso de la Loreto y su madre, la señora Norma, no es aislado. De hecho, constituye una problemática importante e nivel regional: ¿Qué pasa con los adultos mayores que se encuentran en el abandono o cuyas familias ya no pueden hacerse cargo? Aquello es algo que todavía está lejos de resolverse y la demanda por hogares de ancianos es demasiado grande para una oferta limitada en un país, y región, que envejece cada vez más.
Las listas de espera son cada vez más extensas, y los tiempos pueden ser tan amplios que muchos adultos mayores mueren sin obtener un cupo.
En la Fundación Las Rosas, por ejemplo, el año pasado llegaron a existir cerca de 120 postulantes en al hogar, los que no podían atender debido a que ya estaban copados. Aquello pasa en las cinco residencias que reciben una subvención del Estado en La Región, por lo mismo, cuando en la Cuenta Pública Presidencial de mayo del 2014 la entonces Presidenta de la República, Michelle Bachelet anunció la creación de 21 centros de larga estadía (ELEAM) para adultos mayores a lo largo del país, se vislumbró como el inicio de la solución para una dramática realidad.
Pero no todo ha resultado como se esperaba. A la fecha, sólo 14 se encuentran funcionando y uno de ellos está construido, incluso equipado desde hace dos años, pero todavía no se inaugura y se encuentra en el total abandono. Se trata de ELEAM de La Serena.
“Dejó de ser prioridad"
Fue en marzo del 2018, durante los últimos días de la administración anterior, que las obras del ELEAM emplazado en Las Compañías fueron entregadas, y según se tenía presupuestado, éste debía estar operativo en el mes de octubre de ese mismo año.
La expectativa era alta dado la magnitud de la obra. Con 6.000 m2, tuvo un costo de $3.279 millones y tendría capacidad para 70 adultos mayores -35 hombres y 35 mujeres-, pero nada se concretó en los plazos establecidos, según sostiene la exdirectora regional del Senama (Servicio Nacional del Adulto Mayor) Alejandra Díaz, quien sostiene que el proyecto “no fue prioridad para este Gobierno, esto lo digo a la luz de los hechos que hemos visto porque nosotros en su momento dejamos todo en marcha para que se licitara, pero se dejó pasar el tiempo y ahora se ha dilatado al punto que las personas adultas mayores que están solas en esta región, o que no tienen una red de apoyo que puede hacerse cargo, estén sufriendo las consecuencias”, sostuvo Díaz.
Fundaciones vislumbran el problema
El problema se hace cada vez más visible para las fundaciones que reciben subvención del Estado, y que ven cómo, cada vez más, sus listas de espera crecen producto de la falta de recintos, que, se supone, el ELEAM, debería cubrir.
Leonardo González, Jefe Técnico de Fundación Las Rosas, admiten que la situación es compleja. “Siempre las listas de espera han sido de 100 personas, o más, por lo mismo es bastante triste lo que ha pasado con el ELEAM, porque lo construyeron y a nadie se le hace rentable adjudicarse el hogar, porque recordemos que el costo por mantener a un solo adulto mayor es de 750 mil pesos, y eso es sólo una parte ya que hay una serie de otros gastos”, especificó González, agregando que “sí, efectivamente proyectos como este deberían ser prioritarios, porque el tema del adulto mayor y la indefensión en la que se encuentran es un tema país que nunca ha sido bien abordado”, precisó.
María Claudia Droguett Silva, parte del directorio de la Fundación Antonio Farré Azorín, es categórica. “El ELEAM de Las Compañías es un proyecto que tiene que concretarse, porque sería tremendamente beneficioso para la ciudad y para la región, porque se necesitan manos e infraestructura que sean acordes a las necesidades físicas, psíquicas, afectivas de los adultos mayores de hoy”, indicó.
Consultada respecto a la falta de interesados en asumir las operaciones del recinto, manifestó que “es preocupante, porque quiere decir que algo está faltando en el Estado que no se entrega a las instituciones que quisieran adjudicarse esto, las mejores condiciones. Por ejemplo, se adjudica sólo por un tiempo determinado, tres años, lo que hace difícil desarrollar un proyecto”, expresó.
Agrupación de pensionados
Desde la Asociación Chilena de Pensionados, el dirigente regional Raúl Montecinos, quien también forma parte del consejo asesor del Senama coincide con la urgencia de la concreción del recinto de Las Compañías, y hace énfasis en el deterioro que pueden sufrir sus instalaciones.
“Es triste ver este edificio construido, y que no se ocupe, porque hay una necesidad grande. Ahí dentro hay muebles y equipos y es preocupante que frente a un sismo fuerte, o producto del mismo abandono, se vaya deteriorando todo. Esto se tiene que solucionar pronto”, afirmó.
Desde el parlamento
El diputado por la Región de Coquimbo, Matías Walker (DC) expresó que, “alguien debe tomar las riendas del asunto” y el Gobierno tiene que actuar rápido. “Es una lástima que se esté produciendo este retraso. Más allá de algo político, quiero llamar la atención sobre la necesidad de que todas las obras que se iniciaron bajo el Gobierno de la Presidenta Bachelet, se concreten, porque lo mismo nos ha pasado con algunos jardines infantiles, que no se han ejecutado (…) En el tema del ELEAM, si la licitación fue declarada desierta, hay que adjudicarla de manera directa y no dilatar más la situación”, insistió Walker.
Buenas noticias
Pero el escenario no sería tan negativo, según indica el seremi de Desarrollo Social Marcelo Telias. Consultado respecto al por qué no se encuentra operativo el establecimiento de larga estadía, ratificó que en la última licitación no existieron postulantes, por lo que, tal como señala Walker, están trabajando para la adjudicación directa.
“Ya existen conversaciones con distintas entidades que quieren empezar a trabajar con el ELEAM, que quizá no postularon en su momento porque pensaron que no podían ganar esta licitación, y nosotros les estamos informando las posibilidades a un abanico de empresas, por lo que muy pronto estaríamos cerrando esto”, afirmó.
Y se atrevió a dar fechas. Manifestó que en diciembre del 2019 pretenden tener a la empresa encargada y “ojalá, si todo sale bien, que el ELEAM esté operativo el primer trimestre del 2020”.