Ruta D43: Dueños de camiones y buses no descartan movilizaciones ni alzas de pasajes

La polémica por el alto costo del peaje de la carretera Ovalle y Coquimbo y que podría comenzar a operar el próximo 8 de julio sigue dando que hablar. Esta vez fueron los gremios de dueños de camiones y buses de la región quienes sacaron la voz, señalando que no descartan movilizaciones y alzas de pasajes de no mediar acciones para reducir el valor por el uso de la vía.

Así lo manifestó Jorge Aquea, presidente de la Asociación Gremial de dueños de camiones de Coquimbo, presidente de la Federación de Transporte de la cuarta región y director nacional de la Confederación de Dueños de Camiones de Chile, quien recalcó que como organización les ha generado bastante inquietud conocer los valores que se establecieron como cobro para esta carretera “porque sabemos que nos va a producir una cesantía grave”.

El dirigente plantea que diariamente por esta ruta se desplazan máquinas que van hacia la planta Delta, tráfico que además se incrementa durante la temporada de fruta. “En este momento estámos trabajando con un margen de un 30% de ganancias, pero ahora se nos está perjudicando enormemente, porque nos va a significar desembolsar más de 19.000 pesos ida y vuelta”.

Aquea detalla que ya han generado acercamientos con la autoridad para plantearles la situación y que de hecho sostuvieron una reunión con el seremi de Obras Públicas, Pablo Herman. Esperan  generar el diálogo y un entendimiento, para lo cual dice tiene absoluta disposición. Sin embargo, plantea que, de no obtener respuestas concretas, no descartan medidas de presión.  

“Si no hay solución a futuro nosotros estaríamos haciendo un paro, el que están apoyando todas las federaciones del norte de Arica a Coquimbo, porque esto es realmente un abuso”. Respecto de los plazos que se han planteado, indica que “esto no sería más allá de este mes o el próximo mes si no hay una solución”.

De hecho, esperan convocar a más personas. “queremos mandar un mensaje fuerte a toda la comunidad que se está viendo afectada a que sumemos fuerza con todos. Vamos a tener que hacer una protesta o tomarnos las carreteras”, recalca.  

Pero no solo el alto valor del peaje inquieta a los gremios, sino que además denuncian que la carretera no cuenta con las condiciones adecuadas. “Hablan de manuales de seguridad, pero en Las Cardas tenemos un grave problema que en vez de bajar las pendientes aumentaron, nosotros trabajamos con fruta en la temporada y significa que un camión que viene con 45 mil kilos, se puede producir un accidente grave”. A eso se suma, agrega, que no se contempló la construcción de sectores de descanso. “Vamos a buscar una solución con las autoridades de turno, porque no podemos seguir aguantando más”, sentencia.

Por su parte, Francisco Horta, quien representa a buses Horvitur y a otras líneas como Cormar Bus, Via Elqui y Serena Mar, sostiene que le parece “impresentable” el cobro de un peaje en una ruta que no está terminada. “Como transporte de pasajeros circulamos a diario y conocemos perfectamente cada detalle y hay muchos sectores, siendo una ruta nueva, no cumplen las condiciones de calidad que se requieren, te vibra la dirección, curvas que tienen un peralte que consideramos inadecuado”.

Además cree que se trata de un peaje desproporcionado “estamos hablando de 2.900 para autos menores y uno paga $2.800 en Tongoy en una carretera de 223 kilómetros”, expresó.

En cuanto al incremento de costos, plantea que calculan que por bus el gasto mensual sufriría un aumento de entre 700 y 1 millón de pesos adicionales, dando 2 0 3 vueltas al día. “La flota deben ser cerca de 50 buses, estamos hablando de 50 millones de pesos mensuales más”, puntualizó.

Así también lo considera Julio Araya, socio de la Asociación Gremial de dueños de Camiones de Coquimbo “estamos trabajando con un 30% de utilidad y se suma el alza de combustible estaríamos marginando mucho menos por el mismo trabajo, somos los más afectados”, especifica.

NO SE DESCARTA ALZA DE PASAJES

En tanto, respecto a si a raíz del valor del peaje que ahora deberán pagar han pensado en incrementar el precio de los pasajes, Francisco Horta plantea que como líneas de buses están haciendo los esfuerzos para que esto no ocurra, pero que se ve complicado. “Con una tarifa de 2 mil pesos sin duda teníamos la posibilidad de tratar de absorber ese costo, para no traspasarlo al pasajero, pero ahora que supera los 5 mil pesos por cada pasada te das cuenta que nos aumenta en un 30% nuestros gastos fijos y claramente tenemos que evaluar si nos vamos a ver en la obligación de traspasarlo, aunque es algo que estamos tratando de evitar”.

El Día efectuó también un sondeo entre otras líneas de buses, colectivos y los pasajeros que se desplazan hacia la provincia de Limarí y que tendrán que incurrir en este gasto adicional para saber su visión respecto del tema.

El dueño de Buses Vía Elqui, Omar Galleguillos, señaló que resulta “imposible” seguir con la tarifa actual por el “tremendo” valor que le pusieron al peaje. “Va a subir sí o sí, imagine que día a día pagaremos más de $30.000 por bus, es imposible mantener la tarifa”, manifestó.

Sin embargo, Galleguillos admite que está bien que se cobre peaje por la calidad de la carretera que se construyó “pero mínimo que este sea razonable, pero este valor es obvio que no lo es”.

Por su parte, desde Buses Palacios informaron que aún falta coordinar una reunión con todas las partes que componen la organización para determinar qué estrategias se adoptarán en razón del costo del pasaje. “Hasta el momento no se sabe nada, Buses Palacios no tiene nada confirmado”, consignaron.

Por otro lado, quienes ya pensaron concretamente en qué estrategias adoptarán como empresa para hacerle frente al nuevo peaje, Buses Cortés Flores señaló que en un comienzo no se les cobrará adicional a los pasajeros que utilicen su servicio.

Patricio Aguilera, vocero de la empresa, señaló que se van a “congelar” el valor del pasaje por seis meses para no traspasarle el costo al usuario. Sin embargo, posterior al medio año después “se evaluará si se toman otras medidas, pero al corto plazo no se piensa subir ningún precio”.

Por su parte, desde el sector de los colectiveros indicaron que consideran que el cobro del peaje es “nefasto”. Wilson González, secretario de la línea de La Serena - Ovalle, plantea que las personas que se dedican al oficio viven de aquello, por lo que subir el peaje más los combustibles “prácticamente nos estarían tirando a la quiebra”.

Agrega que el coste del peaje vendría siendo como regalar un pasajero, ya que de las cuatro personas que caben en el vehículo sólo estaría ganando por el resto. Esto, considerando si el pasaje que cobra por pasajero se mantiene en los $3.000.

Quien realiza cuatro viajes diarios en el trayecto mencionado, señala que los colectiveros que hacen ese recorrido también le hacen un bien a la comunidad porque muchas veces deben trasladar enfermos y correspondencia, “pero si nos cobran el peaje presupuestado tendríamos que pensar en cerrar este servicio por los costos”.  

Con respecto a un alza en el precio de los pasajes, González reconoció que aún es algo que se debe pensar porque “no es llegar y subir los precios arbitrariamente, porque el costo que pueden tener estas medidas pueden ser incluso más perjudiciales para nosotros”. Por lo que el colectivero dijo que si llegase a existir algún alza en los precios, debe hacerse de forma gradual.

PASAJEROS AFECTADOS

Camila Valderrama viaja a Ovalle desde hace tres años todos los días de la semana por motivos universitarios. La estudiante de tercer año de Ingeniería en Administración de Empresas considera que si llegaran a subir los precios de los buses “será mucho más difícil llegar a fin de mes”.

Valderrama está consciente de que la probabilidad que aumenten los pasajes es bastante alta, pero “ojalá que el alza afecte sólo a los pasajes normales y no estudiantiles, ya que nosotros no tenemos ingresos para poder costear este supuesto incremento”.

Otro ejemplo es el de Luz Luna, que tiene a sus hijos estudiando en la ciudad “Perla del Limarí”. Explica que la mayoría de las veces son ellos los que viajan hasta La Serena, pero “de vez en cuando” es ella la que hace el trayecto mencionado.

Comenta que si los precios de los pasajes en los buses aumentan sería muy malo para su economía, “porque puede que sea poco lo que suba, pero esta diferencia se incrementa a medida que vamos sumando pasaje por pasaje”, precisó. 3701- 6401