Seremi aclara que retorno presencial a clases es voluntario

Se aproxima marzo y las dudas que surgen con respecto al retorno a clases de los alumnos van en aumento. Por lo mismo, el Seremi de Educación de la Región de Coquimbo, Claudio Oyarzún, entregó los lineamientos oficiales y despejó incertidumbres respecto a cómo será el proceso, que ya fue definido el año pasado cuando los establecimientos presentaron sus propuestas de protocolos para un retorno seguro.

Fue claro al indicar que el calendario ya está fijado. “El primero de marzo comienzan las clases en el país, y eso significa que los recintos abren sus puertas. Ahora, uno escucha que van a haber 40 niños hacinados en una sala y eso no es efectivo, porque los protocolos planteados no lo permiten”, enfatizó.

Admitió que, para el Ministerio, lo deseable es que la vuelta a clases sea presencial, pero para que aquello ocurra, se debe hacer de forma diferenciada con los alumnos, por ejemplo, dice Oyarzún, “los colegios deben decir, ‘vamos a trabajar con 15 alumnos este día, con 15 otro día, 10 en otro momento’, alternadamente. Nunca vamos a tener llena la sala como si no pasara nada en el contexto sanitario”, expresó.

De todas formas, sostuvo que los recintos educacionales que tienen mayor cantidad de alumnos presentaron propuestas de un retorno mixto. “En ese sentido, quienes no puedan regresar físicamente, van a seguir recibiendo su material de apoyo impreso, y por supuesto que tenemos que continuar mejorando el tema de la conectividad”, especificó.

“Nadie los puede obligar”

Uno de las interrogantes más frecuentes de los padres tiene que ver con si se les podría obligar a enviar a los alumnos de manera presencial, aun cuando sientan que los van a exponer. En ese sentido, el seremi es categórico y señala que “no hay obligatoriedad”. Sin embargo, reafirma que existen efectos negativos en la educación de los niños al no estar en clases presencialmente. “Nadie puede obligar a los padres. Hay que poner sobre la mesa en su justo equilibrio el tema sanitario, pero también el de los aprendizajes. Las escuelas se han convertido en un espacio muy seguro a partir de la experiencia que tuvimos el año pasado, donde no tuvimos ningún reporte de alumnos o profesores con Covid. Ahora, las escuelas son seguras, pero no son infalibles. Hay riesgos, pero por eso están los protocolos”, refirió la autoridad.

Pero, ¿podría tener alguna consecuencia el alumno por parte del colegio si no vuelve físicamente? De acuerdo a lo que señala Claudio Oyarzún, aquello no debiese pasar. “Aquí si un apoderado dice que no, el colegio tiene que darle una alternativa de cómo puede atender a este estudiante. Eso lo define cada colegio y las familias tienen que tomar la alternativa que más les parezca”. Inclusive, el seremi dijo que ni siquiera estando en una Fase 4, podría volverse una obligación, ya que seguiremos estando en pandemia.

"Seguimos pensando que es factible y es mejor para el aprendizaje que esté el alumno en el establecimiento, pero es una decisión de los padres. Nosotros queremos poner a disposición las aulas, que es donde se generan las reales competencias, y los niños tienen las mismas oportunidades de aprender, pero en pandemia no podemos hablar de un proceso obligatorio”, precisó.

Finalmente, el seremi manifestó que, frente al cualquier problema con el sostenedor del colegio, como que se le esté obligando a un retorno presencial, o que, en caso de decidir que sí quiere volver físicamente, pero no puede comprar el uniforme, están las instancias para darlo a conocer, como la Superintendencia de Educación.

Colegio de profedores insiste en que hay presiones

El presidente regional del Colegio de Profesores, Mario Sánchez, puso en duda la voluntariedad del proceso, y remarcó que había presiones para los establecimientos, tendientes a que retornen físicamente y no vía remota. “Cuando me dicen que es voluntario, que no hay presiones. Yo no sé si será presión o no, cuando el ministro dice que se le van a entregar los recursos a los establecimientos que pretendan volver en forma presencial, y al resto no. Entonces, con esas medidas de presión, el tema de la voluntariedad queda en el aire”, afirma.

Reiteró la postura del gremio respecto a que reingresar en forma presencial es inviable. “No podemos iniciar un proceso de clases en forma presencial en la forma en la que estamos hoy. Nuestra región va en retroceso, por tanto, alguien que sueñe con volver en estas condiciones, tiene un suelo bastante criminal. Cuando estén las condiciones sanitarias, laborales, administrativas, el gremio docente va a retornar porque esa es su función, pero sin arriesgar la vida y la salud de nadie”, finaliza.

Proceso de vacunación

Pero más allá de controversias, este lunes comienza el esperado proceso de vacunación contra el Covid-19 para los trabajadores de establecimientos educacionales, el que considera a profesores, asistentes de la educación, educadoras de párvulos, directores, administrativos y manipuladores de alimentos, quienes fueron incorporados al 30% de la población priorizada por el Gobierno en el calendario de inoculaciones.

El procedimiento considera a 513.621 funcionarios a nivel nacional y a nivel regional, el seremi Oyarzún, señaló que 26.689 funcionarios de la educación serán inoculados y que este proceso se realizará en los mismos recintos que hasta ahora se han dispuesto desde se empezó a vacunar. “Este anuncio evidencia la preocupación del Gobierno por entregar tranquilidad a las familias y todas las comunidades educativas para un retorno a clases presenciales de forma segura, ya que es en el aula donde los estudiantes avanzan mejor académica y emocionalmente”, añadió.

El proceso comenzará este lunes 15 de febrero con los trabajadores mayores de 60 años, y durante la semana se irá adaptando el calendario para continuar con otros grupos etarios.