Es evidente que el consumo de carnes aumenta de manera significativa durante las fiestas patrias y en sus proximidades. Es por eso que la preocupación es creciente en cuanto a la mala práctica del robo de animales o abigeato, la que por supuesto trae consigo la venta ilegal de productos en condiciones que muchas veces no son las mejores. Es por eso que la autoridad se refirió a las medidas a tomar desde los estamentos pertinentes y que incluye a los propios ciudadanos.
La instancia es liderada por la Subsecretaría de Prevención del Delito y cuenta con el respaldo del SAG y el Ministerio de Salud. Catalina Guzmán, secretaria regional de Seguridad Pública, comentó a El Día que “es fundamental que la gente siga privilegiando las carnes en lugares establecidos, porque en estas fechas sube entre un 20% y 25% el robo de animales, ya que hay ventas clandestinas y por ende contempla problemas sanitarios. La gente debe prevenir”, sostuvo la autoridad, quien insistió que los dueños de animales deben proteger a su ganado, revisando los cercos para evitar el robo y teniendo un control continuo del número de especies.
El SAG tiene un rol fundamental al respecto. Pamela Araya, subdirectora de la institución, señaló a El Día que “reforzamos las fiscalizaciones a los locales que están establecidos, porque queremos asegurarnos que las personas consuman carnes que han pasado por una inspección médico veterinaria, de un animal que ha sido faenado en un matadero y de manera autorizada, para dar esa seguridad”, agregó.
Con respecto al robo de animales, agregó que el SAG “entrega unos formularios para poder mover animales, y eso se controla porque es parte de la ley. Todos los animales que pasan por mataderos y llegan hasta los recintos pasan por toda la cadena, para garantizar la seguridad al consumidor. También nos importa que se vendan los cortes que correspondan y el tipo de calidad que se indica sea el que corresponda”, argumentó.
Sobre las fiscalizaciones, Raya indicó que el Servicio Agrícola y Ganadero tiene proyectado durante el año “realizar 310 fiscalizaciones, de las cuales ya se han efectuado 210. Las multas por ley de carne pueden llegar desde los $45 mil a los 45 millones según la gravedad”.
El seremi de Salud, Rosendo Yáñez, indicó a El Día que las recomendaciones son “comprar en lugares establecidos y no en el comercio irregular. Nos preocupa el robo de animales, porque no tienen el sello del doble control del SAG y de la Seremia de Salud. Son 588 las fiscalizaciones que tenemos programadas y ya llevamos 98, con 12 sumarios sanitarios, con un decomiso de 90 kilos de carne, 24 en costillares de cerdo y 66 en carnes de vacuno y embutidos”. 3801i