• La prohibición de consumir alimentos y el aforo máximo, son algunas de las restricciones que tendrán los cines en las comunas que pasen a fase 4 y 5.
Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
A pesar de que la gran mayoría de las comunas del país ya se encuentran avanzando en los pasos de desconfinamiento, las salas de exhibición cinematográfica aún no definen el retorno durante la pandemia, debido a las exigencias sanitarias, como la prohibición de consumo de alimentos y aforo máximo.

Aún no hay noticias sobre la reapertura de cines en la Región de Coquimbo y el país, pese a que este lunes ya comenzó a regir la etapa 4 del plan Paso a Paso en la zona. Hace unas semanas que el Ministerio de Salud dio a conocer el protocolo sanitario para el funcionamiento de estos locales durante la pandemia, en el que se establecen una serie de medidas preventivas.

Entre las normas más importantes y las cuales han generado disyuntiva en el gremio, es el aforo máximo en cada recinto, en donde el documento detalla que corresponde a un 50% en etapa 4 y 75% en etapa 5, respetando al menos un metro de distancia entre una persona y otra. Además, está prohibido el consumo y venta de alimentos y bebidas dentro del cine.

Precisamente estos requisitos han llevado a la Cámara de Exhibidores de Multisala de Chile (Caem) a replantear la idea de reapertura ante la pandemia y es así que mediante declaraciones emitidas por el gremio que agrupa a los principales cines del país: Cine Hoyts, Cinemark y Cineplanet, sostienen que “luego de más de siete meses sin operación debido a las restricciones que ha impuesto la autoridad sanitaria (…) claramente debemos priorizar la salud de nuestros colaboradores y clientes, pero también debemos asegurar la fuente de ingresos de nuestros trabajadores”.

50 por ciento es el aforo máximo  en cines para las comunas de la región en la etapa 4 del plan “Paso a Paso”.

En este comunicado oficial, la Caem, sostiene que las condiciones establecidas “no permiten una operación sustentable, por lo que estamos a la espera de reunirnos con los ministerios correspondientes para buscar otras alternativas de funcionamiento, que den mejores opciones y brinden las garantías necesarias para desarrollar nuestro negocio en su completitud, esto es la exhibición cinematográfica y la venta de alimentos y bebidas”.

Precisamente las medidas sanitarias que apuntan a que los cines puedan funcionar son la reducción del número de butacas, a fin de asegurar el distanciamiento físico entre los clientes, promover la compra de entradas vía online, programar la exhibición de películas en horarios escalonados para evitar las aglomeraciones, restringir la cantidad de accesos disponibles y solo dejar habilitados los principales.

Otro  de los requerimientos que a la vez impide el consumo de alimentos al interior de las salas, es producto del uso obligatorio de mascarilla en todo momento para quienes permanezcan en el recinto. Además, dentro del protocolo se contempla tomar la temperatura en el ingreso  a cada usuario y establecer medidas de desinfección de manos con alcohol gel.

Asimismo, uno de los pasos de higienes elemental en la prevención de contagio, es la desinfección del lugar después de cada función y además, se deben instalar pantallas acrílicas en los puntos de atención de público.

 

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