Demanda en carnes aumenta en septiembre pese a crisis sanitaria

Han sido una alternativa a los supermercados, no solo los días previos a las celebraciones de Fiestas Patrias, sino durante toda la pandemia, convirtiéndose en uno de los rubros que no ha disminuido sus ventas en toda la crisis sanitaria por tratarse de alimentación, especialmente en septiembre donde es tradición hacer un “asadito” para el 18.

Ahora bien, pese a que en la conurbación las fiestas se pasarán en confinamiento, eso no ha disminuido la demanda en las carnicerías, al contrario, desde el pasado miércoles que la circulación de clientes aumentó, formándose largas filas en diferentes locales, los que han debido adoptar los resguardos sanitarios para evitar contagios.

Luis Costa, trabajador desde hace cuatro años de carnes Kar, en pleno centro de La Serena, comentó que en sus dos sucursales una persona tuvo que instalarse en la entrada para controlar el ingreso y tomar la temperatura de los clientes, ya que años anteriores las personas se aglomeraban en su interior para comprar, situación imposible hoy en día.

“El llamado que hacemos a los consumidores es a preferir los locales establecidos, donde nosotros podamos asegurarle la calidad y que el producto que están consumiendo es el adecuado”, Jorge Navarro, Director Servicio Agrícola Ganadero

Por otro lado, desde la carnicería Santa Ana, su jefe de local, Cristian Díaz, comentó que se han abastecido como todos los años, con los mismos productos, las mismas ofertas.

“En el aspecto sanitario hemos establecido los protocolos de distanciamiento, control de acceso con toma de temperatura y alcohol en gel, así como el distanciamiento dentro y fuera del local” agregó.

Protocolos que en Bifesur también habrían implementado, permitiendo el ingreso de solo una persona al local, uso obligatorio de mascarilla, alcohol en gel, así como fomentar el uso de tarjeta para evitar el contacto.

Además, de las clásicas opciones del centro de la ciudad, con el tiempo han ido surgiendo alternativas en zonas residenciales, como es el caso de Casa de la Carne, local ubicado en calle Ulriksen que abrió hace dos meses en plena pandemia.

Allí atiende Earving Escalona, quien comentó que una de las prioridades desde que abrió la carnicería ha sido el resguardo sanitario, por lo que, además de contar con delivery, sanitizan con amonio cuaternario varias veces al día los mesones y congeladores. Permiten el ingreso de máximo tres clientes, quienes deben mantener la distancia, usar mascarilla y alcohol en gel.

Escalona explicó que la demanda aumentó considerablemente desde la semana pasada. El miércoles recibieron una tonelada de carne, el sábado 300 kilos más y actualmente solo les queda el 15% de eso, por lo que estaban esperando su reposición dentro de los próximos días.

Quien también está esperando reponer su stock para continuar vendiendo es Carolina Aranda, dueña de la Boutique de Las Carnes ubicada en calle Ulriksen con Cuatro Esquinas, quien atienda desde la puerta como medida de resguardo, evitando que los clientes manipulen los productos.

En su caso lo más complejo fue el abastecimiento previo a septiembre, puesto que admite que la huelga de los frigoríficos y el paro de camioneros le afectaron, pese a eso  ha estado llegando mercadería la que se agota rápidamente, confesó.

Fiscalizaciones

Cada año desde el Servicio Agrícola Ganadero incrementan  sus fiscalizaciones en  el mes de septiembre con el fin de constatar que la carne cumpla con la normativa y todos los procesos, verificando no solo la trazabilidad del producto, sino también la trazabilidad del ganado.

“Todo nuestro proceso inicia en mataderos donde nosotros fiscalizamos que se cumplan todas las normas establecidas en la ley de la carne y posteriormente, en esta temporada de septiembre, nosotros incrementamos en un 50% las fiscalizaciones para asegurarle a la población que los productos que están consumiendo estén correctamente tipificados y que los cortes sean los que están diciendo” indicó el director del SAG, Jorge Navarro.

Este año en la región, el SAG ha cursado 4 Actas de Denuncia y Citación por infracciones a la Ley de la Carne, principalmente por la trazabilidad de los animales y la no rotulación de la categoría de los cortes en venta al público, quienes arriesgan sanciones que van desde 1 a 100 UTM, hasta la clausura del local en caso de reincidencias.

“Tenemos que dar la seguridad al consumidor que lo que se está adquiriendo es lo que se está ofreciendo en las vitrinas y lo que trae el rotulado” agregó por su parte el Seremi de Agricultura, Rodrigo Órdenes.