Crédito fotografía: 
Cedida
El humorista gráfico, oriundo de nuestra ciudad, muy joven la dejó para radicarse en Santiago. Pero nunca pudo romper sus ataduras con la urbe colonial y por más de una década se desempeñó en diario El Día, donde destacó por su irónica visión de las situaciones cotidianas.

 “Pertenezco a la categoría de los periodistas viejos. Yo trabajé en esto desde el 71 y alcancé a conocer gente de otra escuela, de esos que íbamos a distintas picadas con personajes como los hermanos Gómez López y Lira Massi, que obviamente eran mayores que yo”, dijo alguna vez en una entrevista José Gai Hernández, al pedírsele que se definiera como periodista o humorista.

“No hubo una decisión para que optara por ser humorista. Mi profesión de periodista y una cierta habilidad para dibujar me permitieron muchas veces incursionar en el tema del humor”, manifestaba cuando se le preguntaba por qué se había decantado por el humor.

En diario El Día estuvo por más de una década dibujando el humor editorial. Y ciertamente fue un doloroso golpe conocer la partida última de José Gai, víctima de un mieloma múltiple que se le declarara hace más de cinco años.

“Una de las cosas que permiten la literatura y la historieta es meterse en otras vidas y recrear lo que uno busca vivir”, José Gai Hernández

Fue una lucha denodada, que perdería finalmente, pese a un trasplante de médula e incontables tratamientos.

Pero su trabajo dejó huellas.  José Gai Hernández, periodista titulado en la Universidad de Chile  y escritor, ilustrador y humorista gráfico, publicó las novelas “Las manos al fuego (2006)”, que obtuvo el Premio José Nuez Martín, de la Universidad Católica de Chile a la mejor novela editada en el país en 2005-2006; Los Lambton (2009), premiada también en 2010 por el Consejo Nacional del Libro; y El Caso P (2013).

También hizo  libros de cuentos El Veinte (2007) y Yo, Él (2012), y dos novelas gráficas con guiones y dibujos de su autoría: Capitán Garra, Los lobos del desierto (2010) y Capitán Garra, Morirás en la Frontera (2017), y que forman parte de una trilogía de ambientación histórica, post Guerra del Pacífico.

Su legado también deja dos libros de humorismo gráfico: Y Piñ…era mucho, poquito, nada (2011) y Ojo en Tinta (2012). Anteriormente produjo dos más; uno con Editorial Planeta (1997) y otro con Ril Editores (2002).

Pero  no  es lo único. En otro ámbito, José Gai también practicó la pintura, realizando seis exposiciones individuales, entre ellas una inspirada en La Serena, otra en el valle de Elqui y otra en canciones de Serrat.

Se comprende entonces que Pepe Gai fuera definido como un curioso de lo que podía palpar, oler y beber y quizás por eso, su paso entre escritor y periodista fue tan inmediato y fructífero.

Creador imparable, la obra de Pepe Gai “Los Lambton”, es historia de “unos industriales serenenses en las ruinas de una fundición que fue una de las más importantes del país. De niño me inquietó mucho La Serena”, señaló, indicando que hacer ese libro había sido uno de sus más grandes deseos.

Sus funerales

Pepe Gai falleció serenamente hacia las cuatro de la madrugada de ayer. Su velatorio se lleva a cabo en la iglesia Santuario Teresa de los Andes, Avenida Balmaceda 2447, La Serena. La misa será hoy día a las 12:15, previo al funeral que se llevará a cabo en el cementerio La Foresta de La Serena.

 

Suscríbete a El Día y recibe a diario la información más importante

* campos requeridos

 

 

Contenido relacionado

- {{similar.created}}

No hay contenido relacionado

Cargando ...

 

 

 

 

 

 

 

 

Diario El Día

 

 

 

X